Oración de la mañana del 17 de Octubre

Oracion de la mañana del 17 de octubre

¡Entra a este artículo! Si quieres que Dios te fortalezca para ganar todas y cada una de las batallas, que se te presenten a lo largo de tu vida. Pues con esta poderosa oración de la mañana del 17 de octubre, lograrás que el Señor haga de ti un fuerte guerrero.

Índice()
  1. ¿Dios puede ayudarme a ganar mis batallas?
  2. Consejos útiles para ganar siempre tus batallas

¿Dios puede ayudarme a ganar mis batallas?

Dios es nuestro Padre amado, el que haría todo con tal y ver a sus hijos felices. Pues para Él es un regocijo ver que sus herederos ganen las batallas y guerras que se les interpongan en el camino, así que si pides en oración a Él que te ayude a ganar en estos procesos, sin duda lo hará.

Oh, mi gran y poderoso Rey,

gracias por siempre estar ahí

para protegerme de toda clase

de artimañas del enemigo.

 

Gracias por nunca dejarme solo

en ningún momento de la vida,

y gracias por jamás permitir

que las cosas en mi vida

se salieran de control.

 

Sé que no he llegado

a ser el más recto en comportamiento,

sin embargo, he estado intentando

cambiar durante todo este tiempo.

 

Sé que me he dejado llevar

por las tentaciones que el mundo

me ofrece día a día,

sin embargo, estoy haciendo

un trabajo en mi carácter y

fuerza de voluntad para ser fuerte.

 

Sé que he llegado a ser

débil en gran cantidad de

oportunidades, mi Dios,

pero necesito que me ayudes

a ser más fuerte día a día.

 

De verdad, te suplico

que me tiendas tu mano en

este preciso momento, para que

me des la capacidad de salir

victorioso de cada una de

las batallas que enfrente.

 

Pues día a día, mi Rey amado,

es una batalla nueva que debo

enfrentar para ser triunfador,

y evitar ser derribado por

los secuaces del enemigo.

 

Pues sé que ellos siempre

van a intentar dañar todos

los proyectos que inicio

en mi vida.

 

En esta hora, te imploro

que me ayudes a ponerme

tu fuerte armadura de guerra,

pues ya no quiero seguir

sin una coraza que me proteja.

 

Mi piel y mi carne son

muy débiles como para resistir

todos los ataques que me

lanzan a diario.

 

Es por ello que necesito

de forma tan desesperada que

ayudes a proteger a tu

pequeño y débil hijo.

Dios te pido que me des la valentia necesaria para ganar mis batallas

Porque todo lo puedo

en Cristo que me fortalece,

y necesito que puedas brindarme

aún más de esa fortaleza.

 

En tu poderosa palabra nos

has mandado a ser firmes

y valientes ante toda clase

de ataques del mal.

 

Nos mandas a qué no nos

aterricemos ante ellos, porque

Tú, mi Dios, eres el que va

con nosotros en todo momento,

y nunca nos vas a desamparar.

 

No sabes cuánto agradezco la

gran disposición que tienes para

ayudarnos, aún en las pruebas

más difíciles, Tú estás ahí

para salvarnos de todo mal.

 

Te agradezco por las grandes

cosas que nos has

proporcionado, pues eso es una

señal de las grandes bendiciones que

mandas sobre mi vida.

 

Sé que puedo contar contigo

para lo que sea, y en este momento

te suplico que me ayudes

a ganar todas y cada una

de las batallas que enfrente.

 

Porque soy el tipo de persona

el que le gusta admitir cuando no

puede lograr algo, mi Rey,

y debo decir que sin ti

no podré lograr nada más que

mi triste derrota en el campo de batalla.

 

No quiero parecer débil frente al

enemigo y sus secuaces, pues sé

que ellos están a la espera

de que yo caiga, para poder

reinar sobre mi vida.

 

Sé que no van a querer

que me levante en tu

nombre, es por ello que

harán todo lo posible para

mantener mi rostro contra el suelo.

 

Así que, te imploro

que me des la valentía necesaria

y la dirección para ganar

todas las batallas a las

que me tenga que enfrentar.

 

Pues Tú eres mi guía

y mi escudero por excelencia,

y seré derribado si no

me brindas tu divina ayuda.

 

Te lo suplico, mi Dios amado,

en el nombre del Padre,

del Hijo y del Espíritu Santo.

 

Amén.

Consejos útiles para ganar siempre tus batallas

Lo primero y lo más importante, es pedirle ayuda y dirección a Dios. Además de ello, es necesario que te concentres en el tipo de batalla que enfrentas, de esa forma podrás idear bien la forma correcta de ganar.

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