Oración de la noche del 30 de Abril

oracion de la noche del 30 de abril

En esta hora de la noche, cuando ya llega el momento de ir a descansar, es momento de presentarte ante Dios, accede a través de esta notificación a una poderosa oración de la noche para pedir a Dios que fortalezca tu fuerza de voluntad.

Índice()
  1. Dios puede ayudarte a mantener una voluntad firme
  2. La fuerza de Dios sobrepasa todo entendimiento

Dios puede ayudarte a mantener una voluntad firme

Algunas veces lo dudamos, pero Dios puede mantener en nosotros la voluntad inquebrantable y llevarnos a niveles de firmeza que desconocíamos o creíamos no tener, solo debemos orar y confiar en que Él obrará.

Gracias, Señor por tu presencia en mi vida,

por nunca alejarte de mí, a pesar de las

numerosas fallas que a diario cometo.

 

Esta noche con humilde reverencia,

me acerco a ti en oración para pedirte

que renueves mis fuerzas.

 

Algunos momentos siento desfallecer

y que mis deseos de continuar adelante

casi por completo han menguado.

 

Sé que soy débil, Señor, y que en muchas

oportunidades cedo a los placeres

malvados que este mundo ofrece.

 

Esta noche reconozco mis fallas,

así como las faltas que he cometido

contra ti, los míos y principalmente

contra mí mismo.

 

Perdona, Dios, mis pecados,

no me dejes caer más en tentación,

cuida de mí como a la niña de tus ojos.

 

Ayúdame, Padre, a superar mis limitaciones,

dame la sabiduría para ver hasta dónde

en mis fuerzas puedo llegar.

 

Esta noche desnudo mi alma ante ti,

escudriña en mi ser, saca de mí lo que

me daña y hace débil.

 

Que cuando llegue el día de la prueba

busque de ti para superarla, en vez

de buscar salidas fáciles y erradas.

 

Que mi querer como mi hacer

sean uno solo y que con mi actuar

dé testimonio de tu presencia en mi vida.

 

Quiero salir victorioso de las pruebas,

fortalecido y experimentado en ellas.

 

Amado Padre, que en mi camino encuentre

personas buenas y motivadoras, como

aquellas que levantaban los brazos del

Rey David para que así no perdiera

la batalla.

 

Rodéame de buenos amigos, personas que

caminen contigo y que al ver flaquear mi

voluntad me empujen hacia adelante.

 

Dios altísimo, sopla sobre mí tu aliento,

para que pueda correr la milla extra

y alcanzar el galardón.

Haz de mi un reflejo de ti, no quiero ser debil

Permite que permanezca firme, que a

pesar de las ofertas tentadoras que me

quieran hacer menguar en mis fuerzas,

continúe yo en pie de guerra.

 

Dame discernimiento, Señor, que así pueda

distinguir entre tus designios y las trampas

del maligno.

 

Aléjame del camino fácil, no permitas que olvide

de dónde me sacaste.

 

Permíteme recordar que angosto es el camino

de la salvación, para que pueda apártame

del camino ancho.

 

En las mañanas, sé Tú levantando mi ánimo,

por la tarde dame palabra de aliento y llegada

la noche regálame tu sueño reparador.

 

Quiero ser más como Tú deseas, y menos como

me quiere el mundo, pero solo Tú tienes las

fuerzas que necesito para lograrlo.

 

Señor, que mi debilidad se vuelva mi fortaleza,

que otros vean un cambio real en mi

y que quieran imitarme.

 

No permitas que yo sea oscuridad en la vida de otros,

sino luz que los lleve a tener fuerzas si se sienten

perdidos como estuve yo.

 

Lléname de ti, dame de tus fuerzas, no permitas

que regrese a la debilidad de la carne.

 

Úsame como instrumento forjador del carácter

en la vida de otros.

 

Haz de mí un reflejo de ti, ya no quiero ser

más débil, no permitas que vuelva a sucumbir.

 

Hoy te entrego lo mejor de mí para que lo potencies,

pero también te entrego lo peor, para que lo quites

como se quita la mala hierba del campo.

 

Te doy mi alma, vida y corazón, que me transformes

desde el interior y hagas de mí, un nuevo yo.

 

Padre, permite que recuerde que la prueba no es

eterna y que siempre después de la tormenta

sale de nuevo el sol.

 

Esta noche permíteme descansar en total

confianza de tu mano protectora sobre mi

vida desde hoy y para siempre.

 

Amén.

La fuerza de Dios sobrepasa todo entendimiento

Las pruebas son una constante en la vida de los seres humanos y tener la fuerza de voluntad para superarlas solo se alcanza con la bendición y cuidados que nuestro amado Padre puede darnos.

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