Oración a Santa Marta de Betania para la protección contra el mal
Se describe al mal como la ausencia de Dios en nuestros corazones. Lo que te llevaría a reflexionar que: puedes tenerlo por tu no recibirlo en el tuyo. Lo que quiero decir es que, tú no estás exento a que ello pase. Te confío esta oración a Santa Marta de Betania para la protección contra el mal, en la que pedirás la presencia de Dios en tu vida, en la de tus seres queridos.
Cada vez que vemos un canal informativo, somos testigos de la manera en la que, a veces el mal se propaga por el mundo, desde situaciones particulares de desventura que les ocurren a las personas; hasta hechos más generales como guerras, atentados, conflictos entre países y muchas otras tantas cosas que pudiéramos enumerar, tu y yo en este instante.
Oración potente a Santa Marta de Betania para que te Bendiga.
Una de las cosas más importantes que jamás debemos olvidar es que, tenemos que rogar en oración a Santa Marta de Betania para la protección contra el mal.
Esa es la manera en la cual las Bendiciones te perseguirán. Te recomiendo decir esta plegaria diariamente, incluso también compartirla con amigos o familiares para que en grupo la hagan, o hasta a una misma hora del día. La rogatoria es la siguiente:
“Oh Dios mío, imploro tu presencia en mi sendero,
hazte presente en mi camino, en el de amigos y familias.
Atraigo en este momento a mi hogar,
las palabras que contienen tus mandamientos.
Porque a través de ellas entras en el mismo.
Aleja de este todo infortunio,
maldad o malos sentimientos.
Jamás permitas que sus integrantes cedan ante el maligno.
No me dejes vencer por el mal,
más ayúdame a vencerle con el bien,
porque son muchas las tentaciones
que pueden imponerse en mis pasos,
por eso es mi ruego que guardes mi alma, espíritu y corazón,
así como el de los míos.
Por favor apártame de aquellos quienes
a través del conflicto separan a tus hijos.
Te imploro Dios que entres a mi casa,
en mi corazón que destierres toda malignidad.
Santa Marta de Betania,
intercede en tu obra para que Dios escuche estas solicitudes,
que se arranque la perversión del mundo,
de los corazones de los hombres.
Manda a todos los Ángeles Celestiales
a que acampen en la tierra para ganar esta batalla.
para que cedamos ante las obras bondadosas,
de hermandad hacia el prójimo.
Que las personas tomen conciencia
de la vida y su entorno siempre en mejora.
Agradecido estoy cada vez que me hacer abrir
mi entendimiento a la luz divina,
porque en mi corazón se guarda la bondad,
caridad, apoyo al prójimo, me liberas Señor.
Es mi pedido especialmente
por los niños del mundo, para que los socorras,
ante cualquier persona que carezca de ti, no permitas que sufran,
que su inocencia jamás sea vulnerada por nada ni nadie.
Son estos mis ruegos porque me liberes
de toda maldad, adversidad, del maligno.
Que, aunque el mal pueda entrar
nuestro Padre creador le transforme para lograr el bien.
Para que esto suceda en cada uno
de los integrantes de mi estirpe, la de mis amigos.
Líbrame Señor de todo mal, hoy y siempre.
Para que nada me perturbe,
para que el mal se aleje eternamente.
Amén.
¿Es verdaderamente posible alejar el mal?
Sí efectivamente así es. Tu puedes obrar con sentimientos de cariño, alejar los pecados de tu vida. Hay un refrán que dice que, todo cambio comienza por casa; pues esa morada es tu ser.
Pero es que, en la oración a Santa Marta de Betania para la protección contra el mal, suplicas por la trasformación de malos sentimientos, que nunca los reflejes o exteriorices al mundo. No obstante, es tu determinación la que te va a permitir lograrlo.
Porque debes mantenerte recto e intachable, fuera del alcance de las conductas pecaminosas. Te encargo que trates de cambiar un mal sentimiento que, en un análisis reflexivo, determines que tengas. Que prosigas de esa forma en un periodo de tiempo largo, es el autoexamen lo que te consentirá ser una mejor persona.