5 oraciones bonitas para niños ¡Cortas y milagrosas!
Todas las personas necesitamos de Dios, por ello es importante que desde niños comencemos el camino hacia el Creador con cada sacramento. Sin embargo, lo primero que debemos enseñarle a los más pequeños es, cómo deben orar, ya sea que quieran pedir o agradecerle algo al Altísimo.
Oraciones hermosas para los más pequeños de la casa
Si quieres incentivar la oración en tus hijos, es relevante que entiendas que las plegarias que les enseñes deben ser simples y no muy largas. Puesto que así, podrán memorizar y entender el significado de cada palabra, esto tiene la intención de facilitar su proceso de comunicación con el Creador.
Oh, Padre Celestial
hoy vengo a agradecerte por
este nuevo día, por mis Padres,
hermanos, amigos, y hasta por mis maestros.
Pues con su enorme paciencia,
me guían por el camino del bien.
También quiero pedirte que me cubras con tu escudo
y me protejas de todo mal en mi contra.
Mantenme alejado de aquellos que no buscan tu palabra,
pues solo Tú eres el camino hacia la verdad.
Mi Padre, aquí está tu hijo,
que te pide lo acompañes siempre,
nunca me desampares ni me dejes caer en tentación.
Amén.
Mi Padre, mi Señor,
aunque no te pueda ver,
sé que siempre estás conmigo.
Pues tu presencia me acompaña,
ya que puedo sentirte.
Por ello, sé que me guías con tu Luz,
y mandas a tus Ángelespara que mantengas mi camino alejado de todo mal.
Tu mano me sostiene y me acaricia,
cuando me siento mal o estoy enfermo.
Padre, sé que me amas como a todos tus hijos,
y tus bendiciones siempre me acompañan.
Y te pido que durante mi camino
no permitas que pierda la Fe.
Pues este mundo está repleto de injusticias,
pero solo contigo todo estará bien.
Mi Dios bendito, te pido que
hoy y todos los días de mi vida,
me acompañes y que nunca me desampares.
Amén.
Señor mío, Padre mío
yo soy solo tuyo, mi corazón y amor te pertenece,
pues solo en ti encuentra la calma que tanto necesito.
Tu gloria día a día me fortalece,
tu amor me llena de confianza y tranquilidad,
tu promesa de vida eterna me llena de esperanza y gozo.
Pues sé que la muerte no es el final,
si no el comienzo de la vida a tu lado.
Por ello, Padre, hoy más que nunca te pido que me acompañes,
me bendigas y fortalezcas mi Fe.
Amén.
Jesús, mi Señor y Salvador,
hoy te doy gracias porque me permitiste
vivir un nuevo día.
Sé que tus bendiciones para mi son infinitas,
ya que me permites ver, oír, escuchar y reír.
Eres tan bueno y bondadoso que
me pusiste en este mundo un par de ángeles,
como lo son mis Padres terrenales.
Pues estos me han guiado por el camino del Señor,
me enseñaron tu palabra,
para que mi Fe fuera creciendo hasta que se consolidará.
Por ello, te pido que les permitas permanecer a mi lado,
ya que como buen pastor ellos me han encaminado,
y quiero al crecer ser un hijo fiel, tal como ellos lo han sido contigo.
Padre Creador, dales por favor la mayor de las fortalezas,
pues ellos son mi ejemplo a seguir,
y confío en que tu inmensa misericordia,
les permita seguir educándome para servirte.
Amén.
Dios mío, Padre mío,
yo te amo con mi corazón,
Tú eres la fuente de mi alegría y bienestar.
Por eso, que hoy comienza mi camino hacia ti,
te pido que no me desampares,
todos los días de mi vida.
Y ayúdame a que mi Fe se fortalezca,
pues mis firmes creencias serán el motor
que me impulsen a seguir.
Así que mi Salvador, acógeme en tus
brazos para que pueda descansar
todas las noches en tu nombre.
Amén.
La familia que ora en unión se mantiene unida
El deber de todo Padre es enseñarle el camino de Dios a los hijos, por ello es importante orarle al Padre todos los días en Familia. Puesto que este acto es ejemplo de unión y amor familiar, lo que es bien recibido por el Creador.