5 Poderosos versículos bíblicos del amor matrimonial ¡Hazlo duradero!

Si quieres hacer que tu matrimonio, sea una unión fructífera, te recomiendo leer estos 5 poderosos versículos bíblicos del amor matrimonial que te ayudarán a hacer de tu matrimonio uno duradero. Además, de ser un ejemplo para quienes pronto se adentrarán en esta nueva etapa.

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Igualmente, estos pasajes bíblicos los puedes leer  igual antes de dar ese gran paso que cambiará tu vida. Además, harán que regocijes en la emoción, alegría, nerviosismo y quizás nostalgia que esta etapa tan importante te causará.

5 Poderosos versículos del amor matrimonial

Gracias a estos poderosos versículos bíblicos, podrás hacer duradero tu matrimonio, asimismo te guiarán para tener una alianza llena de amor, fe en Dios, respeto y muchos otros valores; igualmente para saber llevar las situaciones que se presenten en tu vida matrimonial, debido a que son personas con personalidades diferentes y por lo tanto piensan diferente.

Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella para hacerla santa. Efesios 5:25-26. En primer lugar, este versículo de la Biblia, nos hace referencia a que los esposos deben cuidar  y amar a sus parejas.

Tus mejillas bajo tu velo parecen cortes de granada. Aunque haya sesenta reinas, ochenta concubinas e infinidad de mujeres, para mí solo existe una mujer, mi amada perfecta, mi paloma.  Cantares 6: 7-8. Dios quiere que el hombre solo vea y ame a su esposa, que para él, ella sea única, a pesar que hay muchas mujeres en el mundo.

Nada puede acabar con el amor, nada puede destruirlo. Si un hombre ofreciera toda su fortuna para comprar el amor, la gente lo despreciaría. Cantares 8:7. El amor no es algo que se compre, y mucho menos que se venda, es un valor que se gana poco a poco con las acciones que una persona realice, si una persona intenta comprar el afecto de alguien, las personas lo rechazarían porque pensarán de él como un sujeto sin principios.

Pero en el comienzo de la creación Dios “hizo al hombre y a la mujer”. “Por eso el hombre dejará a su papá y a su mamá para unirse a su esposa y los dos serán un solo ser”. Así que ya no son dos, sino uno solo. Por tanto lo que Dios ha unido, que ningún ser humano lo separe. San Marcos 10:6-9. La pareja, al unirse en el Santo sacramento del matrimonio, se convierten en una sola persona, donde deben estar juntos, apoyándose el uno al otro; en cambio, además dejarán a sus familias y asimismo ellos formarán una y deberán cuidar de su matrimonio mutuamente para que este no fracase.

 Si uno cae, el otro lo levanta. En cambio, al que está solo le va muy mal cuando cae porque no hay quien lo ayude. Si dos se acuestan juntos, se darán calor, pero si alguien duerme solo, no habrá quién lo caliente. Uno solo puede ser vencido, pero dos se defienden mejor. Es que la cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente. Eclesiastés 4: 10-12. Cuando se crea el vínculo en el casamiento, la finalidad es unir a dos personas que se amen tanto como para unirse en matrimonio y que quieran compartir sus vidas, juntos; igualmente para crecer como personas, cuidar del otro y ayudarle cuando más nos necesite.

La Biblia y el matrimonio

Finalmente, no hay mejor ejemplo de como debe ser el matrimonio que el que aparece en el mejor libro, el cual es la Biblia. Ahí están los mejores consejos, de como se debe llevar la vida en unión para hacer de él, uno lleno de gracia ante los ojos de Dios.

Por consiguiente, en el matrimonio las parejas deben mantener el respeto entre los dos; para evitar malos momentos, que de alguna manera puedan contribuir, con que esta nueva etapa sea una mala experiencia. Por esta razón, los esposos deben ser fieles uno al otro así como lo es Dios con sus hijos.