Oración de la mañana del 18 de Diciembre

Oración de la mañana del 18 de Diciembre

En este nuevo día, toma un momento para conectarte con Dios a través de esta poderosa oración. La vida está llena de desaciertos, a diario cometemos errores que nos traen consecuencias que no podemos evadir, pero Dios te ama.

Índice()
  1. La vida de los perfectos errores
  2. De cada error una nueva oportunidad

La vida de los perfectos errores

Hoy podemos ver como Dios puede usar hasta un error cometido por ti, para enseñarte una valiosa lección de vida. Por lo tanto, es importante no dejarte agobiar después de cometer un error, acude a Dios, pide ayuda y dirección.

Amado Dios y bendito Padre eterno,

hoy vengo a ti, nuevamente agradecido

por un día más de vida.

 

Te agradezco por tus favores y esa misericordia

que me permite tener acceso cada día a

tu presencia para adorarte, para abrir mi

corazón y mi alma completamente a ti.

 

Sin reserva alguna, porque Tú conoces lo

más profundo de mi ser, sabes muy bien

lo que siento y lo que me hace sentir

feliz, triste y todo lo que provoca en mí

un sentimiento.

 

Tú me has dado emociones para expresarme,

para sentir y para poder comunicarme con

las personas de mi entorno, es por eso que

ahora yo quiero acudir a tu presencia.

 

Para rogarte en esta oportunidad que Tú, Señor,

me enseñes a ver los errores que cometo desde

un punto de vista diferente, ya no como un

fracaso el cual lamentar y entristecerme.

 

Sino como una experiencia que me enseña

una valiosa lección de vida, como ese

maestro que la vida me envía para

enseñarme cómo funcionan las cosas.

 

He tenido muchos intentos fallidos en mi vida,

Tú mejor que nadie lo sabe, pero hasta ahora

esos fracasos solo han dejado en mí un mal

sabor, una mala experiencia.

 

Cuando cometo un error en mi vida, este genera

muchas emociones negativas, una de ellas es la

vergüenza, a qué dirán las personas al ver que

me he equivocado, que he cometido un grave

error, el cual muchas veces no sé cómo solventar.

 

Cuando cometo un error, la confusión viene a

mi mente y no me permite pensar con claridad,

yo te ruego que, en estos momentos, Tú me

ilumines y me des la sabiduría para poder

tomar la decisión más inteligente.

Padre yo confio en lo que sucede en mi vida es obra tuya

Señor, esta mañana ayúdame a entender, que las

equivocaciones son parte de la vida, que

el único perfecto eres Tú, haz que mi mente

no se atribule ante un fracaso o error y

que yo desarrolle la capacidad de manejar

mis emociones de manera inteligente.

 

Padre amado, consuélame ante los desaciertos

de la vida, aquellos que me llenan de tristeza

por no haber logrado las cosas como yo esperaba.

 

Reconfórtame y prepárame para volver a intentarlo

esta vez, confiando más en ti para que todo salga

bien, y si no está en tus planes que yo lo haga,

muéstralo a mi corazón para dejar esa idea

y tener paz en mi corazón.

 

Mi vida está en tus manos, Dios, yo confío en que

lo que sucede en mi vida es porque Tú lo permites,

de la misma manera en que las cosas que no se dan

es porque no era tu voluntad.

 

Enséñame a sacar de cada error una lección

nueva de vida, que esa experiencia me haga

más fuerte cada día, para así estar preparado

para cuando sea mi momento de la victoria.

 

Muéstrame cada día las nuevas oportunidades

que me regalas, equípame y dame ánimo para

aprovecharlas cada una sin perder tiempo.

 

Porque Tú eres bueno, eres el Dios de las

nuevas oportunidades, así como cada

amanecer es para mí una nueva

oportunidad de vivir y aprender.

 

También las oportunidades que me regalas

después de haber cometido un error, son

abundantes, así como tu misericordia es

abundante sobre mi vida.

 

Hoy te doy gracias, porque en todo momento

sé que estás detrás de cada experiencia de vida,

que nunca vas a permitir que ninguna prueba

me destruya, porque me amas.

 

Y ese amor que tienes por mí, es mucho

más grande que cualquier error que yo

pueda cometer.

 

Amén.

De cada error una nueva oportunidad

Dios no juzga tus errores, Él tiene misericordia de ti, quiere usar estas experiencias de vida para hacerte crecer y madurar como su hijo amado.

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