Oración de la mañana del 22 de Octubre
Haz click en el siguiente enlace y encuentra una oración extraordinaria que te ayudará a conectarte con Dios y permitirle ser Él quien se ocupe de todo lo que pudiera causarte daño.
Mantener la salud en tiempo de enfermedad es posible
Cada vez es más recurrente el deseo de no salir de casa por miedo a las enfermedades, y este miedo sin darnos cuenta, llega a enfermar nuestra alma. Así que lo mejor que podemos hacer es poner todo en manos de Dios y dejar que Él cuide de nosotros.
Una vez más acudo a ti, Padre amoroso.
Señor, que con esmero cuidas de todos,
hoy me pongo de rodillas para agradecerte
por permitirme despertar un día más.
Gracias te doy por dejarme contemplar un nuevo
amanecer, y observar las maravillas que el mundo
ofrece, también te doy gracias por el aliento que sale de mi
y me deja dar a voces testimonio de tu santa gloria.
Señor, hoy me veo al despertar y contemplo tu grandeza,
miro con asombro la dedicación que has puesto en mí,
me detallo y pienso que soy barro cobrando forma
en las manos expertas de su amoroso creador.
Gracias, porque no has escatimado en nada,
me formaste como persona completa y sana,
libre del yugo de las enfermedades del mundo.
Has hecho de mi todo conforme a tu espíritu,
me trabajas y me formas según tus deseos,
cuando otros me ven, saben que soy obra tuya.
Hoy cuando el mundo entero teme por su salud,
eres Tú quien me mantiene en pie y me cuidas,
me siento más que seguro bajo tu santo manto.
En esta mañana, prometo mantenerme tranquilo
y caminar confiado, porque sé que Tú te mantienes
obrando y tu salvación a mi vida ha llegado para no dejarme.
Te adoro con el corazón y te alabo con mis labios,
me siento seguro en ti porque creo en tus palabras
y confío en el sacrificio que hizo Cristo por mí en la cruz.
Señor, mi oración de esta mañana es no solo para agradecer
sino también para pedirte, sigas cuidando de mi ser,
mitigues mis dolencias y cures alguna enfermedad
que pudiera comenzar a gestarse en mi interior.
Hoy le quito poder a cualquier espíritu que cause dolor
y a todo demonio de enfermedad, así pues, me declaro sano
y vencedor en Cristo que me fortalece.
En esta hora, elimina de mi vida cualquier maldición
que mi cuerpo pudiera arrastrar de generaciones pasadas,
y me declaro libre de cualquier dolencia física o espiritual.
Dame fuerza física, mi buen y gran Dios,
y nutre con salud mis órganos internos,
así como mis músculos, piel y extremidades,
maximiza el potencial de mi cuerpo, Padre.
También, llena de salud mi mente y espíritu,
a fin de mantener mi alma enfocada en ti, Señor,
y no desviarme nunca del camino que me has trazado.
Hoy más que nunca confío en ti y en tus promesas,
sé que los cielos se abren en bendición, Señor,
y que todas ellas logran alcanzar mi vida.
Líbrame, Señor, de todo lo malo que me espera afuera
y sigue cubriendo mi cuerpo con tu manto protector,
solo Tú eres bueno y a ti sea la gloria hoy y siempre.
No te olvides, Señor, del resto de tus hijos,
algunos no gozan de esta salud y pido por ellos,
restaura sus vidas y dale la oportunidad de mejorar.
Así como cuidas de mí, hazlo con ellos, Padre,
regálales ese milagro que esperan ver hoy
y dales la tan necesaria salud para poder vivir.
En este tiempo donde todos temen salir a las calles,
muestra tu poder y gloria, arrancando del lazo de
la muerte a tus hijos amados que muestran
verdadera fe y confianza en ti.
Quedo en tus manos santas, Señor,
sé Tú guiado mis pasos durante este día
y permitiendo que este, termine en bendición,
confío en tu fiel compañía y protección sobre mi vida hoy.
Amén.
Vivir como personas sanas, solo puede hacerlo el Señor
Mantener la salud en tiempos de enfermedad, sin duda alguna solo se puede conseguir si permanecemos en estrecha conexión que el que todo lo puede y está dispuesto a cuidarnos con amor, el Señor.