Oración a Santa Bárbara entra en el corazón con tu sangre mujer dominadora

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En ocasiones necesitamos ayuda o conoces a alguien que necesita ayuda para tener fe en Dios. Hoy te enseñaré la oración que entra en el corazón con tu sangre a Santa Bárbara. Dejemos que el espíritu y el entendimiento trabajen en proporciones casi iguales. Primero, piense en las necesidades, teniendo en cuenta cualquier conciencia de la carga del espíritu.

🙏 Oración a Santa Bárbara ENTRA EN EL CORAZÓN CON TU SANGRE Mujer Dominadora 🙇

Reza, tentativamente, en esa línea, pidiéndole a Dios que continuamente enfoque tus oraciones. Si, después de cubrir tal terreno en la oración. Así que realiza la oración entra en el corazón con tu sangre a Santa Bárbara para que Dios entre en tu corazón y te abra el entendimiento sobre aquellas cosas que no logras entender.

Índice()
  1. La oración que entra en el corazón con tu sangre a Santa Bárbara
  2. Un volumen de fe es lo que necesitamos todos

La oración que entra en el corazón con tu sangre a Santa Bárbara

Hay situaciones en las que necesitamos volver a renovar nuestra fe, nuestra creencia o cualquier aspecto de Dios con nosotros. Para estos casos, realiza la oración que entra en el corazón con tu sangre:

Oh Santa Bárbara, en esta ocasión vengo

para que entres en mi corazón con tu sangre,

 tú que eres una mujer dominadora

y que deseas el bien para todos nosotros.

 

Te pido que me ayudes a solucionar

todos los aspectos que afectan mi vida.

 

Renueva mi fe en Dios y permite

que pueda responder todas mis dudas.

 

Santa Bárbara, te alabamos porque

la fe no viene de la sabiduría o el

entendimiento de los humanos

sino a través del poder de tu Espíritu.

 

Así como el siervo Pablo predicó,

sus palabras no fueron su sabiduría,

sino una demostración de tu poder a través de él.

 

Señor, necesito tu fuerza para hablar palabras

sabias a otros para que su fe crezca en Ti.

 

Dame las palabras para compartir

el trabajo que has hecho en mí con

aquellos que necesitan esperanza.

 

Como aquellos que escuchan a Pablo,

conocerán la fe en el Señor.

y adan no fue el enganado sino que la mujer siendo enganada

.Querido Dios, te alabamos que no

me abandones, siempre estás conmigo;

al final de su vida, todos dejaron

a Pablo, pero no estaba solo.

 

Continuó luchando porque tú estabas

a su lado, dándole fuerza,

así que el mensaje de tu amor y

gracia continuó siendo proclamado.

 

Padre, nunca me

abandonarás o me dejarás.

 

Tenerte a mi lado me da la capacidad

de enfrentar lo que venga;

ayúdame a mantener mi fe en

ti a pesar de mis circunstancias,

 porque tu estás conmigo.

 

Santa Bárbara, la paz que viene

a través de la fe en ti

supera todo entendimiento humano,

por eso, ayúdame a mantener mi

fe sólo en ti para tener paz

y no vacilar en mi pensamiento.

 

El mundo quiere destruir la paz

que tengo a través de la fe en ti,

por eso, protege mi mente y mi corazón

de las cosas de este mundo.

 

Derrama tu perfecta paz en mi corazón

para que me cuides de hacer malas cosas.

 

Querido Señor, tu voluntad es mi deseo,

ya que quiero tu palabra en mi

corazón y en mi mente,

es útil para todas las cosas de la vida,

crea en mi vida el conocimiento

sobre tu voluntad.

 

Haz que el deseo de mi corazón

sea el deseo de tu corazón,

entonces me regocijaré haciendo tu trabajo,

mi confianza está sólo en ti.

 

Por que sé que usarás cada día de mi vida

para mostrar a todos a mí alrededor

tu amor y gracia puedo tener planes,

pero los planes de Dios prevalecerán.

 

Para fortalecer nuestra fe, todos

los días son una oportunidad.

 

 Nuestra oportunidad más significativa

para la esperanza viene en la confianza

de que él nos ama tanto

que envió a su hijo para convertirse en

el sacrificio necesario para borrar

nuestros pecados.

 

Ahí es donde nuestra fe comienza cada día,

sabiendo que somos suyos.

 

Amén.

Un volumen de fe es lo que necesitamos todos

Rezar sin fe es como tratar de cortar con un cuchillo sin filo, mucho trabajo gastado con poco propósito. Porque el trabajo que se realiza con la oración depende de nuestra fe: "Según tu fe, que así sea." La verdadera fe se glorifica en tiempo presente, y no se preocupa por el futuro. Asimismo, las promesas de Dios están en tiempo presente y son lo suficientemente seguras para tranquilizar nuestros corazones. La palabra de Dios es tan buena como su vínculo y no necesitamos tener ansiedad.

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