¿Quién escribió la segunda epístola de tesalonicenses? ¿De qué trata?
Amado lector, vivimos en medio de un mundo totalmente confundido el deseo de Dios en su misericordia quiso, que tuviéramos esperanza y seguridad de que las cosas van a mejorar. Asegúrate en Dios y su palabra, solo Él quitará la tensión, angustia, ansiedad y te dará seguridad y través de la biblia en cada libro nos muestra cómo lograrlo, sabemos que es necesario estudiar para poder llenarnos de esa sabiduría. Analizando así ¿Quién escribió la segunda epístola de tesalonicenses? ¿De qué trata?
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¿Quién escribió la segunda epístola de tesalonicenses? ¿De qué trata?
Sabemos que la primera epístola a los tesalonicenses, la escribió el Apóstol Pablo y fue dirigida con un propósito en felicitarlos por que se habían mantenidos fieles en el servicio al Señor Jesucristo, Aunque también los corrigió ciertas pensamientos erróneos que tenían, particularmente con respecto a la segunda venida de Cristo. Además insta a llevar una vida santa, y anima a reafirmar a los cristianos en las verdades esenciales del evangelio.
2 Tesalonicenses 1:1 indica que el libro de 2 Tesalonicenses fué escrito por el apóstol Pablo, probablemente junto con Silas y Timoteo.
Y no muchos meses después que la primera. Probablemente la primera epístola fue malentendida, especialmente respecto a la Segunda Venida de Cristo. Los cristianos de Tesalónica se hicieron la idea que Pablo había mencionado que el día de Cristo, se venía con prontitud; que su venida estaba a punto de ocurrir.
Los tesalonicenses, ellos pensaban que ya había acontecido, así que dejaron de trabajar. Ellos estaban siendo gravemente perseguidos. Pablo escribió para aclarar la confusión que tenían y para consolarlos. Pablo explica lo que sucederá en el Día del Señor, en el capítulo 2 Tesalonicenses 2:1-12. Luego los anima a permanecer firmes y apartarse de los hermanos que no vivan de acuerdo al evangelio; según se afirma en 2 Tesalonicenses 3:6.
Pablo se refiere a varios pasajes del Antiguo Testamento en su discurso sobre el fin de los tiempos, con lo cual confirma, a los profetas del Antiguo Testamento. Mucha de su enseñanza sobre el final de los tiempos, en esta epístola, está basada en el profeta Daniel; y sus visiones. En 2 Tesalonicenses 2:3-9, él se refiere a la profecía de Daniel con respecto al “hombre de pecado” (Daniel 7-8).
Segunda epístola a los Tesalonicenses
Dios nos insta a predicar la palabra, y a orar, por los demás, para que la palabra corra y sea glorificada, así nos guardará de hombres malos; el Señor encamine nuestros corazones al amor; y a la paciencia de Cristo.
Por tanto, es deber del cristiano, glorificar al Señor, con nuestra manera de vivir en esta tierra; no dudando de su Palabra, porque es la verdad de Dios Padre.
El deber de trabajar a los Tesalonicenses
Apartándose de todo hermano que ande desordenadamente. Porque ustedes mismos saben de qué manera deben imitarnos; pues nosotros no anduvimos desordenadamente entre vosotros, ni comimos de balde el pan de nadie, sino que trabajamos con afán y fatiga día y noche, para no ser gravosos a ninguno de vosotros; no porque no tuviésemos derecho, sino por dar a nosotros mismos un ejemplo para que nos imitases.
Porque también cuando estábamos con nosotros, ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma. Porque oímos que algunos de entre ustedes andan desordenadamente, no trabajando en nada, sino entremetiéndose en lo ajeno. A los tales mandamos y exhortamos por nuestro Señor Jesucristo, que trabajando sosegadamente, coman su propio pan.
Y ustedes, hermanos, no se canse de hacer bien. Si alguno no obedece a lo que decimos por medio de esta carta, a ése señálenlo, y no se junten con él, para que se avergüence. Más no lo tengan por enemigo, sino amonestarlo como a hermano.
Aplicación Práctica
¿Quién escribió la segunda epístola de tesalonicenses? ¿De qué trata? El libro de 2 Tesalonicenses está lleno con información que explica el final de los tiempos. También nos exhorta a no estar ociosos; y a trabajar por lo que tenemos. Hay también algunas grandes oraciones en este libro que pueden ser un ejemplo para nosotros sobre cómo orar por otros creyentes en la actualidad.
Nadie tiene la vida comprada en este mundo, por ende, debemos animarnos unos a otros; entre tanto que vemos que el fín se acerca. Confiemos más en Dios.