Hebreos 10:38 – "Más el justo vivirá por fe", Valiosa lección
En la primera parte de Hebreos 10:38, nos topamos con la siguiente frase: “Más el justo, vivirá por fe”, unas palabras muy sencillas pero con un significado no tan sencillo.
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A menudo nos encontramos durante la lectura de la biblia, muchos versículos que no logramos entender del todo. Llegamos incluso a ignorarlos o pasarlos por alto y continuar, sin considerar que todos estos textos resultan muy valiosos y deberíamos prestarles atención por igual.
Querido lector, nosotros en Fieles a Dios como seguidores de Cristo, estamos aquí en la tierra por alguna misión y parte de ella es enseñarte sobre la palabra. Si no entiendes del todo el texto de esta parte del versículo, enfocaremos este artículo a su resolución y explicación. Tomaremos distintos puntos de vista y llegaremos a un desemboque con el que estarás satisfecho.
Más el justo vivirá por fe ¿Qué quiso decir Dios?
Principalmente, es necesario definir la palabra “justo” ¿A qué se refiere el Señor cuando habla del justo? Bueno, como puedes imaginar, se trata de alguien que actúa correctamente, que sigue el camino de la rectitud y se desempeña en pro de la justicia, y al hablar de que “vivirá” podría interpretarse de varias maneras, más adelante exploraremos la más destacada.
Sin embargo, ¿Que seamos justos, no le basta al Padre?, ¿Por qué nos pide tener fe?, Pues, la respuesta es en cierto modo ambigua y podemos separarla en 2 fracciones:
Ser justo como camino al cielo:
Siempre hemos sabido que nuestro señor pregona la justicia y el actuar de forma correcta, si hacemos esto, estaremos asegurando nuestro puesto en el Reino de los Cielos. Pero la pregunta principal radica en que si somos buenos y justos, pero no tenemos fe ¿No iremos al cielo?.
La verdad es que, a pesar de que el Todopoderoso quiere ser glorificado, siempre pondrá en primer lugar la bondad de nuestros corazones y nuestro actuar. Muchos son los que hoy dicen seguir a Dios, pero actúan en contra de las enseñanzas cristianas.
Así como grandes pensadores y filósofos han reflexionado y hasta el mismo Papa Francisco lo ha dicho: Es mejor ser un no creyente, pero una buena persona; que ser un creyente lleno de maldad. No obstante, es aquí donde hay que hacer un paréntesis, y es que no serás nunca un verdadero fiel cristiano, si en tu corazón no está el objetivo de ayudar y la bondad no tiene espacio.
Al final siempre es necesaria la fe, puesto que en ella radica lo que será el “vivir” del que verdaderamente Dios se refiere.
Tener fe en paralelo con ser justos:
Ya afirmamos el hecho de que siempre será más importante ser una persona humilde, llena de amor, ayudante del prójimo y necesitado, que ser un supuesto creyente atentando contra las leyes divinas en su actuar. La fe siempre va a ser importante, pero toma un segundo plano cuando de nuestra forma de ser se trata.
Claro que siempre, estando verdaderamente en Cristo, seremos santos y puros. Pese a lo anterior, hay que mencionar que esta dualidad “fe/justicia” es lo que todo ser humano debe tener en su espíritu.
Ahora bien, después de todo esto, llegamos a la hora de explicar la vida que Dios nos ofrece en fe. Pues esta vida no es diferente de la que tenemos actualmente, se trata de una vida en Jesucristo, lo que sí vuelve diferente nuestra forma de ver las cosas. Para un mejor entendimiento, se podría decir que la fe no se trata solo de “creer” sino de actuar en beneficio de eso en lo que creemos.
Al fin y al cabo, toda esta frase también se remonta a que una persona que ciertamente tiene fe y confía en la palabra, se esfuerza por seguir la voluntad de Dios, será justa. Una persona justa, nunca estará completa si no tiene fe, sin embargo, siempre será mejor la justicia sin fe que la fe sin justicia.