3 hermosas oraciones católicas para hijas ¡Mantenlas protegidas!

3 hermosas oraciones catolicas para hijas

Todos los que tenemos la dicha de ser Padres sabemos que, los hijos son nuestras joyas más preciadas, pues los amamos con el corazón. En este sentido, siempre buscamos de cuidarlos y alejarlos del mal. Por ello es importante diariamente recitar una oración católica de protección para las hijas.

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  1. Plegarias hermosas para proteger a las hijas
  2. ¿Por qué debemos pedir por nuestras hijas?

Plegarias hermosas para proteger a las hijas

Si no sabes cómo hacer una plegaria para tus hijas, no te preocupes, pues a continuación te daremos 3 ejemplos que te servirán de guía, y que podrás usar en todo momento. Sea que la quieras para protección o que necesites que Dios corrija la conducta de tu hija rebelde.

Padre mío, Creador del cielo y del universo,

hoy vengo a suplicarte que

guíes a mi hija por el buen camino,

y permitas que se rodee de amigos, 

y personas que la conduzcan hacia ti.

 

Pues solo contigo, mi Dios, conseguirá

el refugio y la protección que tanto necesita.

Ten en cuenta que es solo una pequeña flor

y podría perderse entre las tinieblas.

 

Y es que es una niña tan inocente,

por lo que no ve al lobo vestido de oveja,

Tú que conoces los corazones,

sabes que en ella no existe maldad.

 

Por ello, mi Cristo Redentor, te pido que ilumines a mi hija,

ya que tu bien sabes que el mal siempre nos acecha.

Y temo por ella,

pues no es tan fuerte de Fe y corazón.

 

Así que te pido que no la desampares,

y te ruego que la mantengas siempre bajo tu protección.

Tú, Dios, que todo lo ve y todo lo puede,

mantenla a salvo, y lejos de la perdición.

 

 Amén.

Tu que eres el todopoderoso, ayudala en todas sus pruebas

Virgen María, Tú que distes a luz

a El Salvador de la humanidad, 

te pido que en tu inmensa misericordia

socorras siempre a mis hijas.

 

Oh, piadosa, oh, clemente Madre de Cristo,

protege siempre a mis niñas,

pues solo Tú entiendes la

agonía de las madres/padres desesperados.

 

Por ello recurro a ti,

pues como Madre, entiendes mi preocupación. 

Y confió en que tu inmensa misericordia,

intercedas por mí y mis hijas a los ojos de Jesucristo.

Pues ningún hijo es capaz de negarse a

las peticiones de su Madre.

 

También te pido que,

cuando mis hijas se dirijan al trabajo o a la escuela,

vayan y regresen bajo tu divina sombra.

 

Y que no descuiden sus obligaciones,

ni se aparten de su fe,

te imploro, mi Señora.

 

Cuando el maligno se acerque a ellas para tentarlas,

protégelas con tu amor de Madre.

Ya que en este mundo tan turbulento, 

la violencia y malos ejemplos abunda.

 

Así que te ruego que tu Bendición

descienda sobre todos nosotros.

En especial sobre mis hijas, y las hijas

de mis amigos y familiares, hoy y siempre.

 

Amén.

 

Jesús, mi Señor y Salvador,

en este día vengo a suplicarte por el bienestar

de mis hijas y sobrinas,

que puedan caminar bajo tu divina protección.

 

Que seas la luz en su camino, 

y más cuando caminen entre tinieblas.

Pues solo Tú eres la fuente de vida eterna,

por lo que ningún maligno se atreverá a 

meterse con tus hijas.

 

También te pido que llenes sus corazones

de tu amor y bondad.

Para que así recurran en todo momento, 

tanto a ti como al Padre.

 

Señor, llévate sus preocupaciones y sufrimientos,

pues este mundo está repleto de

tanta avaricia y maldad, por lo que

muchas caemos en desesperación.

 

Padre, Tú que eres el todopoderoso,

ayúdala en todas sus pruebas.

Dale sabiduría, pero sobre todo

confianza en ti, para que logre el entendimiento

que tanto necesita.

 

Que logre entender que,

todo pasa por tu voluntad.

Y quien confíe en ti y te siga salvo será,

pues al ser un Dios misericordioso,

nunca abandonas a tu rebaño.

 

Mi Creador, te suplico que

nunca la desampares ni abandones,

pues las pruebas suelen ser duras, 

pero sé que contigo a su lado,

no tendrá que preocuparse.

 

Amén.

¿Por qué debemos pedir por nuestras hijas?

La verdad, Dios no necesita nuestras peticiones para ayudarnos, pues es un ser omnipotente que todo lo ve. No obstante, las peticiones para ayudar a los hijos son bien recibidas, ya que según varios versículos, los hijos son un regalo del Creador.

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