Hermosa novena a San Miguel Arcángel para la limpieza espiritual
El Arcángel Miguel fue llamado nuestro protector, los Ángeles cumplen una labor de protección ordenada por Dios a favor nuestro. Cada vez que necesitamos de su ayuda ellos de igual forma interceden por nosotros, los Ángeles traen paz siempre y cuando nuestra vida este consagrada a Dios, esta hermosa novena a San Miguel Arcángel para la limpieza espiritual nos puede ayudar en momentos donde pecamos, asimismo necesitamos redimirnos ante Dios.
Nosotros necesitamos siempre estar limpios delante de Dios, nuestra naturaleza humana es pecaminosa así muchas veces pecamos causando impureza en nuestras vidas. San Miguel Arcángel nos ilumina en el camino a nuestro Señor, siendo él de los guerreros más poderosos del Señor que cumple un arduo trabajo acá en la tierra.
¿Deseas limpieza espiritual? Realiza la novena
Ante Dios debemos presentarnos con un corazón limpio, asimismo sin manchas ni arrugas. Ya que esto Dios nos lo exige para tener una relación plena con él todos los días. Cada mañana es un despertar, que se nos regala así debemos agradecer. La hermosa novena a San Miguel Arcángel para la limpieza espiritual nos hará estar puros además de aptos para agradar a Dios.
A San Miguel se le hace llamar el Arcángel de rayo azul, está en una posición de mando el cual se caracteriza sobre todos los demás, tiene una poderosa armadura, en ella lleva el sol y la luna. Él pertenece al octavo coro que alaban a Dios, cada coro tiene su jerarquía por tanto todos rinden cuentas a Dios. San Miguel Arcángel es uno de los que pelea contra todas las potestades de maldad.
Las novenas son plegarias con devoción, las cuales se hacen durante nueve días continuos. En este caso son nueve días de oración e intercesión para nuestra limpieza. También la novena puede hacerse los mismos nueve días haciendo un día por semana, cumpliendo los mismos nueve, por ejemplo, nueve sábados. No importa la forma que se haga, lo importante es tener la disposición como el ánimo para completar este hermoso acto.
Primer día, para iniciar el novenario es importante comenzar con la señal de la cruz rezando un Ave María como el Padre nuestro. Para iniciar el primer día hacemos la oración a San Miguel. ¡Oh! San Miguel. Reunido con todos los Serafines ayúdanos a encender nuestro corazón en el amor de Dios por lo que nos hace sentir desprecio hacia lo que nos hace pecar.
Al igual se hace los demás días restantes, con la señal de la cruz el Padre nuestro como el Ave María. Cada día debe tener una completa consagración asimismo a la ora de la reunión se debe orar con mucha fe.
Nuestro poderoso San Miguel Arcángel está escuchando entonces es quien va a interceder por cada uno de los que estén elevando sus más sinceras plegarias esperando que Dios les limpie de sus pecados.
San Miguel Arcángel, con nuestras más sinceras oraciones venimos a ti suplicando intercedas a Dios. Para que él pueda con su infinita misericordia limpiarnos, por el amor que tuvo su hijo Jesús siendo misericordioso, así nos limpie para que podamos estar sin manchas.
¡Oh! San Miguel, hermoso Ángel de Dios.
Concédenos la oportunidad de ser oídos,
para poder mantener una comunión integra ante Dios.
No queremos ser más pecadores, queremos
que nuestras vidas estén aptas para poder
entrar a la presencia de Dios.
Gracias San Miguel Arcángel por ser
nuestro protector, nuestro guía
en los momentos de dificultad.
¿Funciona la limpieza por San Miguel Arcángel?
Cuando nos proponemos a hacer una hermosa novena a San Miguel Arcángel para la limpieza espiritual, debemos tener en cuenta que primero debemos saber hacia que situación haremos la novena. Ya sea para perdón de pecados, para limpieza, por protección o cualquier propósito que tengamos en mente, no podemos hacer oraciones en vano. Debemos creer además actuar para que Dios pueda obrar en el propósito al cual estamos dando inicio.
San Miguel Arcángel concede muchos milagros, él interviene a favor nuestro cuando somos blanco de muchas maldades del maligno. Él ha peleado contra el mismísimo diablo asimismo es a quien Dios manda para que pelee las más grandes batallas espirituales.
A través de él, podemos obtener respuesta a nuestras peticiones, solo debemos caminar en rectitud a Dios para que seamos bendecidos, limpiados y aceptados por Dios en los cielos.