¿Por qué se cree que las Ánimas Benditas son malas? ¿Realmente lo son?

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Antes de poder sacar alguna conclusión con relación a este título, debemos conocer exactamente que son las Ánimas Benditas. Se dice que son espíritus que mueren y van al purgatorio que es algo como un Pre-Infierno donde van a limpiar sus pecados. También se dice que pueden cumplir peticiones a los vivos y hasta que eran tres en total. Pero ¿Por qué se cree que las Ánimas Benditas son malas?

🙏 ¿Por qué se Cree que LAS ÁNIMAS BENDITAS SON MALAS? ¿Realmente lo son? 📖

Las Ánimas Benditas del purgatorio son todas aquellas almas de fieles cristianos fallecidos que han cometido pecados leves. Y que reposan en un estado de purificación y expiación para estar libres de faltas y poder presentarse ante la gloria del señor. Estas almas que se encuentran en el purgatorio aún no están en posición de visualizar al Dios eterno. Mientras limpian sus almas son visitados y consolados por la Virgen María y por los Ángeles.

El purgatorio es una de las pruebas que Dios nos ofrece para mostrarnos lo grande que es su bondad. Pues aun muriendo en pecado; nos da la oportunidad de purificar y limpiar los errores no tan graves cometidos en vida. Para así poder entrar al Reino de los Cielos y disfrutar de la vida eterna.

Índice()
  1. ¿Debemos temer a las Ánimas Benditas?
  2. ¿Las Ánimas Benditas son malas?
  3. Las Ánimas devuelven en favores si pedimos por ellas

¿Debemos temer a las Ánimas Benditas?

Las Ánimas Benditas no son más que las almas de aquellas personas que ya dejaron su paso por la tierra. Y se encuentran purificando sus pecados para entrar frente al trono de Dios. No hay motivo alguno por el cual haya que tenerles miedo y mucho menos pensar que el purgatorio es un infierno del bien. Gracias a la infinita bondad de Dios aquellos que han muerto en pecado tienen la esperanza de limpiarse de impurezas y entrar al cielo.

El principal mandamiento del catolicismo es: Amar a Dios por sobre todas las cosas y le sigue: amarás al prójimo como a ti mismo. Por lo tanto, las ánimas son parte de lo que fueron nuestro prójimo en vida y es nuestro deber amarlas y ayudarlas. Pues mientras mayor es la necesidad, mayor debe ser nuestra obligación.

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La Virgen María, nunca amó a ningún hijo en la tierra tanto como ama a las ánimas benditas. Ella las consuela con su infinita bondad y les ayuda a sobrellevar el sufrimiento que padecen en el purgatorio.

¿Las Ánimas Benditas son malas?

Las ánimas benditas no son malas, son almas que se encuentran en proceso de limpiar aquellos pecados que cometieron en vida. Si Dios les ha dado la oportunidad de librarse de sus penas y sus culpas en el purgatorio. Significa que la gloria de Dios es infinita y que aun cometiendo faltas Él nos intenta ayudar para llevarnos con Él al reino de los cielos.

Entonces ¿Por qué se cree que las Ánimas Benditas son malas? Si Dios quiere ayudarle, si Dios quiere tenerlos cerca de él en el cielo, no pueden ser almas malas. Si estando en el purgatorio logran ser puras y jamás ofenderán a Dios, pues él se las llevará hasta la eternidad. La justicia de Dios demanda la expiación de los pecados para la limpieza de las almas. Dios nos invita a orar para que estas almas puedan salir del purgatorio y encontrarse con su santo reino para la vida eterna y en paz.

Las Ánimas devuelven en favores si pedimos por ellas

Al salir del purgatorio y entrar al reino de los cielos las ánimas empiezan una transformación. Ahora estarán verdaderamente junto a Dios y nos hay peso ni sombra que opaque la relación espiritual que tanto deseaban tener con el Padre Celestial. Estas ánimas ahora se encuentran totalmente agradecidas por aquellas oraciones destinadas a Dios para su salida del purgatorio y del infierno.

¿Por qué se cree que las Ánimas Benditas son malas? Ahora en perfecta paz junto a Dios, desean pagar los favores hechos por ellas, ruegan por los que las ayudaron. A los pies del trono de Dios y lo hacen con tanto fervor, con tanto amor y agradecimiento que Dios no puede negarles nada.

Su gratitud no conoce límites, no cesan de orar por quienes oraron por ellas.  Las almas ya junto a Dios. Entregan sus oraciones para proteger a sus amigos de los peligros y demonios que los acechan con la intensión de que no caigan en el pecado.

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