Bendición de la mesa - Bendice la comida para acción de gracias

Uno de los momentos en los que toda la familia está reunida, es al momento de comer. Algunas familias están juntas en las 3 comidas, otras en 2 y otras solo en una, pero, sin duda alguna, la mesa es un lugar de reunión familiar. Es en estos momentos cuando debemos orar como familia por la bendición de la mesa y bendecir la comida para acción de gracias.
https://www.youtube.com/watch?v=us163ruLt-A
A pesar de que en cada familia existe quien trabaja y, a través de su trabajo, trae el alimento, antes de él está Dios, siendo Dios el proveedor número uno de cada hogar.
Por tal motivo, debemos dar gracias y bendecir los alimentos. Además, estaremos levantando un altar familiar sin darnos cuenta, ya que toda la familia está en un mismo lugar, en un mismo sentir orando.
Bendición de la mesa - Oración familiar
Acción de gracias no es solo un día. Acción de gracias es todos los días, porque Dios no nos bendice solo un día en específico o una semana especifica, Dios nos bendice todos los días de nuestra vida, incluso en la eternidad.
“Amado Dios, Padre celestial,
a ti damos toda gloria, honra y alabanza;
porque solo tú la mereces,
porque has sido tú Dios quien ha traído
estos alimentos a nuestro hogar.
Has sido tú, Señor,
quien ha puesto esta comida en nuestra mesa.
Eres tú quien nos sustenta, eres tú quien nos protege,
eres tú el que suples cada una de nuestras necesidades.
Por eso te damos gracias Señor,
gracias por estos alimentos que hoy nos das.
Ahora Señor, te pedimos que bendigas esta mesa,
que este compartir sea placentero.
Te pido que en este momento nos una más,
que nuestros lazos se hagan más fuertes
y que sea un momento agradable
donde podamos hablar,
contar nuestro día, reírnos juntos.
Alegrarnos juntos y darnos consejos.
Permite que nuestra mesa sea un lugar
donde forjemos la confianza
entre cada uno de nosotros.
Señor, te pido que bendigas estos alimentos,
que, así como has traído comida a nuestra mesa,
lo hagas en todos los hogares del mundo,
que hoy nadie se vaya a la cama sin comer.
Usa a tus hijos para que sean esos mensajeros
que lleven alimentos a los que necesitan,
bendice cada hogar y cada mesa,
así como lo has hecho con nosotros.
Gracias por tu amor y por tu hijo Jesucristo,
porque por medio de él hoy recibimos estos alimentos.
Te agradezco por esta comida que hoy tenemos frente a nosotros,
me siento agradecido por mi familia.
Gracias por cada una de las personas
que están a nuestro lado,
gracias porque nos das lo que pedimos,
lo que necesitamos y aún más.
Bendice también a cada persona que
hoy comparte con nosotros,
a cada uno de los que estamos
sentados en esta mesa.
Gracias mi Dios porque más que alimentos
nos has dado algo más importante:
tiempo de calidad para compartir.
Asimismo, también queremos pedirte
que bendigas esta comida.
Bendice las manos que la han preparado,
así como también, bendice las finanzas
de quienes la proveyeron.
Prepara nuestros cuerpos
para recibir estos alimentos,
que podamos compartirlos en salud
y toda afección que pueda existir,
te lo lleves en el nombre de Jesús.
Proclamamos una palabra de sanidad,
por el sacrificio consumado en la cruz del calvario.
Porque por tus llagas hemos sido sanados.
Nosotros creemos en tu palabra
y en el sacrificio del hijo de Dios por nosotros.
Una vez más, gracias.
Gracias por la bendición que hoy nos
concedes de sentarnos a la mesa
para disfrutar de tus provisiones.
Hoy nos has reunido una vez
más para estar juntos
y te pido, en el nombre de tu hijo Jesús,
que sigas reuniéndonos.
Amén.”
¿Por qué debemos bendecir la mesa?
Bendición de la mesa. Muchos hogares han olvidado el significado que tiene la mesa, es en este lugar donde se forjan grandes lazos de confianza y se comparte, no solo durante una fiesta, en navidad o alguna ocasión especial, sino en todo momento.
Los problemas llegan cuando menos se esperan y no en una fecha festiva, es por eso que el compartir y bendecir la mesa se debe hacer en todo momento.
Si hacemos esto todos los días, estaremos forjando lazos fuertes y una unión familiar que ningún hombre podrá romper.
No debemos olvidar que en todo momento debe estar Dios de por medio, si el centro de una familia es Dios, esta familia será una familia bendecida, prosperada y llena de felicidad.