Oración de la mañana del sábado 25 de Septiembre
¡Ven! Si quieres que tu corazón sea sanado por el poder de Dios en esta hora, para que pueda estar limpio y libre de todo mal. Pues con esta oración de la mañana del 25 de septiembre, podrás pedirle al Señor que te ayude con este proceso.
¿Es posible limpiar mi corazón de toda clase de maldad?
Si cuentas con la ayuda divina de Dios, sí podrás lograrlo. Aunque debemos decir que no es tarea fácil, pues la maldad es algo muy duro de combatir, ya que estaríamos haciendo guerra directa al enemigo, y este no hará que la tarea sea tan fácil como suena.
Te imploro que en esta hermosa
mañana me des una cobertura
especial para hablar contigo
en esta hora.
Necesito que me escuches
y que puedas cumplir
cada una de las peticiones que te
haré en los siguientes minutos.
Pero primero debo agradecerte por
darme la oportunidad de seguir
viviendo y disfrutando junto a mis
seres queridos en esta tierra.
Gracias por nunca abandonarme,
y gracias por permitirme estar
en esta vida junto a las
personas que más amo.
Te suplico que me otorgues
largura de días para
poder disfrutar junto a ellos
por mucho tiempo más,
y te pido que les dé a ellos
mucha vida y salud en abundancia.
Te pido que por favor
me perdones de todos
y cada uno de mis pecados,
te pido que me otorgues la salvación,
y que no me juzgues debido
a mis actos cometidos en el pasado.
Te suplico que me des
la fuerza para seguir adelante,
y que me des la determinación para
seguir luchando aún cuando ya no
tenga ganas de avanzar.
Te suplico que en esta hora
me hagas libre de todo mal
en general, y que me otorgues
la sanidad que mi corazón
se merece en este tiempo.
Te suplico que limpies mi corazón
con la preciosa y milagrosa
Sangre del Cordero.
Y que no permitas que ni
una pizca de mal y oscuridad
vuelva a ingresar a él.
Haz de mí una criatura pura,
que sea digna de entrar
a tu reino de los cielos,
pues sé que si no limpio mi alma,
jamás seré capaz de ingresar.
En este momento lanzo toda
ansiedad sobre ti,
porque sé que te preocupas
por mí y que me libraras
de toda clase de cargas.
Te pido que saque todo
lo malo de mi ser,
y que me hagas una persona
digna de ser ayudada
y bendecida en tiempos futuros.
Pues en tu palabra has dicho:
no juzgues su apariencia,
ni su altura, porque lo rechazo.
El Padre no observa las
cosas que las personas ven,
las personas miran solo la apariencia ,
pero Dios mira el corazón.
Y es por ello que quiero
tener un corazón digno
de ser admirado por ti,
oh, mi Gran Padre, porque es
vergonzoso saber, que tu órgano
más preciado tiene manchas.
Tú mismo lo has dicho
en la palabra, debemos cuidar
nuestro corazón sobre todas
las cosas, porque de él mana
la vida.
No quiero que mi vida
se vea afectada por las
manchas de mi alma
y mi corazón, porque no hay nada
que desee más que vivir una
larga y bendecida vida.
Quiero vivir aún después de
dejar está plano terrenal,
y sé que solo es posible
si dejo atrás a mi viejo hombre.
Quiero que me des una
segunda oportunidad, como a todos
y cada uno de tus hijos allá en el cielo.
Quiero alabarte y adorarte
para la eternidad,
pues no hay nada más aterrador
que la muerte eterna.
Quiero ser un hijo tuyo
desde este momento,
y sé que solo será posible
si dejo atrás todo lo que
me ata a este mundo.
Entre esas cosas, quiero dejar atrás
la cantidad de oscuridad y maldad
que existe en mi corazón en estos
momentos.
Así que pongo estás palabras
en tus manos, mi Dios,
y quedo a la espera
de una gratificante respuesta.
Te lo pido de todo corazón,
en el nombre del Padre,
del Hijo
y del Espíritu Santo.
Amén.
Consejos útiles para tener un corazón puro y sano
Debes iniciar aferrándote mucho a Dios y a su poderosa e inmortal palabra. Pues de ellas conocerás la forma en la que debes vivir para tener un corazón y un alma sanos y libres de maldad.