¿Cuál fue la oración que Jesús nos enseñó? ¡Debes orarla cada día!

No cabe duda que Jesús de Nazaret vino a la tierra a enseñarnos el camino que debemos recorrer para llegar a Dios, pues su propósito fue predicar la verdad. En este sentido, Jesucristo les indico a sus discípulos que, la oración es la única manera de comunicarse directamente con el Creador, por ello recito una de las oraciones más importantes que conocemos hoy en día, si quieres saber cuál es, sigue leyendo.

Plegaria que Jesús nos enseñó

Jesús siempre dijo que era la fuente de verdad y vida, ya que al ser el hijo unigénito del Creador, sería la única persona capaz de comunicarse con el Creador mediante la meditación (oración). Por ello, y tras la necesidad que tenían sus seguidores de alabar y comunicarse con Dios, Jesús procedió a enseñarles cómo se debe orar.

En este caso, la plegaria que nos enseñó Jesús es la más orada a nivel mundial, y no es más que, El Padre Nuestro. Sí, por si no lo sabías, es el rezo más poderoso que existe en la actualidad, y aunque existen dos versiones que explican el por qué Cristo la recito a sus apóstoles, no cabe duda que es el mejor ejemplo para alabar y pedirle a Dios.

Importancia de la oración según Jesús

Sin duda, la importancia de la oración, según Jesús, es que con esta logramos comunicarle a Dios nuestras inquietudes y necesidades, así como también nos permite alabarlo y adorarlo. Por ello el Mesías les indico a sus apóstoles como debe ser una verdadera oración cuando les enseño El Padre Nuestro, diciéndoles lo siguiente:

• Las oraciones deben ser personales, pues describen nuestras necesidades y agradecimientos; debido a esto Jesús nos recomendó hacerlas en solitario.
• También les dijo a los apóstoles que las plegarias deben salir del alma y corazón, es decir, que el rezo no debe ser un acto mecanizado. E incluso, aunque repitamos todos los días la oración del Padre Nuestro, se deben sentir y meditar cada palabra que se dice.
• No importa si estamos sentados, parados o de rodillas, si lo que decimos es de corazón, la oración le llegará a Dios.

Si aún no entiendes bien como debe ser una oración que sale del alma, intenta analizar cada párrafo y frase que recitamos al decir el Padre Nuestro.

En este caso, la oración del Padre Nuestro es sin duda la plegaria por excelencia, puesto que en ella pedimos todo lo esencial que cualquier persona debe pedir. Un ejemplo claro es cuando pronunciamos las siguientes palabras.

• El pan de cada día.
• No nos deje caer en el pecado.
• Líbrenos del mal.

Dónde sale reflejada la oración que Jesús nos enseñó en la Biblia

La oración más hermosa y poderosa que existe es la que nos enseñó Jesús, y aunque en la Biblia se pueden encontrar dos versiones de este rezo, ambas son igual de importantes. En caso de que quieras saber en qué parte del libro sagrado puedes leerlo, debes buscar en el evangelio de San Mateo 6:9-13; pues el discípulo habla de la oración y explica cuáles son las características que Jesús les enseño al momento de orar.

Por otro lado, también puedes buscar en Lucas 11, 1-4, en este caso el apóstol puntualiza que, Cristo se encontraba orando profundamente y por ello nadie se atrevía a interrumpirlo. Pero, al culminar su plegaria, uno de sus discípulos le imploraría al maestro que les enseñara a orar tal como lo hacía Él. Por lo que Jesús comenzaría a recitar la oración que conocemos hoy en día.

Un dato curioso que cabe mencionar es que, aunque las versiones del Padre Nuestro de San Lucas y San Mateo son muy similares, la plegaria que describe Mateo en 6:9-13 es más larga, pues en esta se reflejan 7 peticiones, mientras que en la de Lucas solo resaltan 5.

Finalmente, no importa cuál versión utilices diariamente al momento de orar, pues el valor de la plegaria se centra en que nazca desde el corazón. Por ello, cuando decidas conectarte con el Creador, hazlo en un momento que te encuentres solo y dedícale el tiempo suficiente, ten en cuenta que al hacerlo seguro obtendrás las respuestas que tanto buscas.