Hermosas oraciones de agradecimiento por la comida que hay en mi mesa

Dar gracias a Dios por los alimentos y comida que recibimos a diario en nuestra mesa es algo muy bonito, sin embargo, en la actualidad esa costumbre se está perdiendo. Pero, si Tú aún tienes este hábito, te invitamos a recitar las siguientes consagraciones.
Oraciones bonitas para bendecir los alimentos
Tomarte un tiempo con el fin de dar gracias por el pan de cada día, es una agradable acción, ya que, le dices a Cristo que te sientes feliz con todo lo que te da. Por esto, te creamos estas oraciones de agradecimiento por la comida.
En el nombre del Padre, del hijo y
del espíritu santo. Amén.
Señor, antes de empezar a consumir estos alimentos,
que con mucho amor nos has de dejar en la mesa,
te quiero dar las gracias, por fijarte
en esta pequeña familia.
Porque, a pesar de que las situaciones se tornen difíciles;
tu misericordia nos acompaña cada día para que
nuestro estómago no se quede sin alimento.
Amén.
Cristo, bendice estos víveres que hoy vamos a comer,
de igual forma, te ruego que bendigas aquellas personas
que ahora no cuentan con un alimento en su hogar,
no permitas que se acuesten sin probar
un bocado de comida, Padre.
Por último, solo te pido que santifiques estos alimentos,
y que en nuestra morada nunca falte
este elemento vital para la vida.
Amén.
Jesús, Tú, que eres el dueño de los árboles,
animales y el agua de esta tierra, haz que
estos alimentos que vamos a consumir, sean
glorificados en tu nombre y que nunca falten
en mi humilde hogar.
Amén.
Gracias, Dios, por las provisiones que me das cada día,
por permitirme tener un trabajo, con el que puedo
comprar los alimentos que en este día voy a ingerir.
Nada más, te suplico, que la comida nunca falte
en mi hogar, y que esta me nutra, así, poder
seguir alabándote a diario.
Amén.
Nazareno, en el día de hoy mi familia y yo
nos reunimos en este lugar, a fin
de agradecerte, porque nos diste el privilegio
de tener comida en nuestra mesa.
Así mismo, también quiero que bendigas
a las personas que trabajan en este hogar,
para que podamos alimentarnos.
Amén.

Padre amado, hoy, te doy gratitud por la comida
que me das a diario, aunque no sea mucha,
sé que viene de tus manos y que Tú nunca
me desamparas en medio de la soledad.
Porque siempre estás velando por el bienestar
de esta persona. Así que, gracias te doy por la
comida que me das todos los días.
Amén.
Bendice, Señor, mi familia, consagrad
mis alimentos y santifica mi trabajo,
que es el que me permite llevar el pan de
cada día a mi mesa.
Porque yo sé que sin ti y tu misericordia,
esta comida no podría manifestarse
en mi casa.
Amén.
Amado Señor, en este instante te damos gracias
por habernos permitido despertarnos
con vitalidad y salud.
Sobre todo, por ofrecernos los
alimentos que ahora mismo, se encuentran
disponibles en nuestra mesa,
con el fin de ingerirlos.
Amén.
En este momento de oración, Jehová,
te quiero dar las gracias por la comida
que hoy estoy a punto de consumir, de igual forma,
por mi trabajo y la ropa que traigo puesta.
Ya que sin tu presencia en mi vida
y corazón, no existieran ahora mismo.
Amén.
Querido Jesucristo, gracias por los alimentos que me das
a diario, también por la salud y bienestar de mi familia.
Asimismo, te agradezco mucho, por haberme permitido
despertar en este día para seguir adorándote,
como yo lo hago siempre.
Amén.
Señor Todopoderoso, gracias por satisfacer
las necesidades que tiene mi cuerpo
de hambre y sed.
Pues, todos los días al despertarme, agradezco porque
tu gran corazón no deja de entregar
bendiciones a mi familia.
Sobre todo, nos permites, cada principio
y final de este, tener nuestros alimentos.
Amén.
¿Por qué es bueno bendecir?
Es muy importante la bendición, porque a través de ella podemos conseguir los beneficios que queremos manifestar, es decir, tener el alimento diario, esto creará que el universo, en especial Dios, duplique el deseo. Pero, si maldecimos, las dichas que Jesús nos tiene preparadas, no se podrán manifestar.