Oración de la noche del 2 de Junio - Señor dirige mi viaje

oración señor dirige mi viaje

Viajar es una experiencia muy placentera que todos deberíamos vivir, sin embargo, es casi imposible que los nervios se apoderen del viajero y cuando esto ocurre todo puede volverse estresante.

Índice()
  1. La oración tiene el poder de llevarnos en un viaje de paz
  2. La tranquilidad al viajar solo la puede dar Dios

La oración tiene el poder de llevarnos en un viaje de paz

Cuando oramos activamos el poder de Dios sobre nuestras vidas, le decimos a él que lo necesitamos como director de nuestros pasos, así que antes de viajar debería ser costumbre dejar todo en sus manos protectoras.

Señor mi corazón está agradecido

por todas las bendiciones que me das,

tal vez no merezco tanto de ti,

sin embargo, tu no me abandonas.

 

Este es un día especial,

hoy emprendo una nueva aventura

que me llevará a separarme

por un tiempo de mi casa.

 

Pero espero que tú me acompañes

y seas el verdadero capitán

este camino que me dispongo a recorrer.

 

Hoy quiero dejar en tus manos

el viaje que me dispongo a realizar,

se tú obrando a mi favor en todo momento.

 

Admito que hay circunstancias que yo no

puedo controlar y que en ocasiones los

nervios se apoderan de mí, por eso te ruego

seas tú quien tome el control desde el momento que

mis pies salgan de las puertas de casa.

 

Declaro que tu unción y cobertura

son parte de este viaje

y por tanto llegaré a mi destino

lleno de tu bendición.

 

Padre adorado

coloca ángeles a acampar alrededor de mí,

para que sean ellos guardando mi vida

de los ataques del maligno.

 

Hoy echo por tierra

cualquier maquinación del diablo

que pudiera presentarse en mi contra.

 

Pues tu sangre preciosa

me cubre a toda hora y me guarda

de las asechanzas malvadas.

 

Todo plan que se levante desde las tinieblas

en mi contra queda echado por tierra en el nombre

poderoso de Jesús y que tu gracia resplandece

sobre el camino que habré de transitar.

 

Desde ya agradezco tus bendiciones

pues soy consciente que este viaje

es parte de tu propósito.

Padre quiero dejar mi viaje en tus manos

Que los planes que llevo en mi mente

se vean realizados de manera positiva

y que sean para tu gloria.

 

Pero que en todo momento sea tu

voluntad la que me guie, para que

así tu nombre se glorifique.

 

Dios todo poderoso espero me permitas llegar

a puerto seguro, en casa quedarán

personas esperando por mí, declaro una

especial bendición sobre ellos.

 

Así como desde ya bendigo

la vida del buen piloto que conduce esta

unidad, también la de su compañero de viaje,

su asistente y todos los pasajeros.

 

Que los peligros y asechanzas

que llenan los caminos no sean sobre

este vehículo ni en el resto de los

que transitan hoy las calles.

 

Mantén esta unidad en condiciones

optimas de movilidad y desempeño,

protege todas sus piezas

desde el motor hasta las ruedas.

 

Si llegare a presentarse

pronostico de tormenta,

aleja esta de nuestro camino.

 

Señor, si en algún momento del viaje

algo amenaza con salir de control

pon la sabiduría en el chofer para

captar la asechanza a tiempo y pueda

detenerse hasta que pase el peligro.

 

Protégenos padre

de las personas mal intencionadas

que buscan dañar a través del robo a los

viajeros, para que todos estamos seguros.

 

Llévanos con la protección

que solo brinda el amor de un padre,

cuida de cada uno de tus hijos.

 

Guarda con amor mi vida

permite que pueda llegar a mi destino

y pueda realizar las tareas

para las que de mi casa he salido.

 

Y al regresar, cúbreme Dios

durante todo el camino,

que mi retorno sea placentero.

 

Escucha amado mío

esta oración nacida del alma

y atiende a mi clamor.

 

Desde ya estoy en tus manos,

manos que son un lugar seguro,

no alejes de mi tu cuidado,

te lo pido en el nombre

de nuestro señor Jesucristo.

 

Amén.

La tranquilidad al viajar solo la puede dar Dios

Todos queremos disfrutar el trayecto implícito en un viaje, por eso no debemos olvidar invitar al pasajero más importante, ese que velará por nosotros durante todo el camino sin tomar descanso.

Subir