Oración de la noche del viernes 9 de Julio
Antes de ir a dormir, entra y haz esta oración para entregar todos tus miedos a Dios. Él ha prometido acompañarte y protegerte siempre, no debes temer a nada ni a nadie jamás.
Dios te ha dado un espíritu valiente
Aun en medio del miedo, Dios te acompaña. El Señor te ha provisto de todo lo que necesitas para que te sientas seguro, su eterna protección para ti no va a fallar nunca. Hoy en oración, da gracias a Dios por su cuidado para ti.
Padre celestial, yo en este momento de la noche,
antes de ir a darle un descanso a mi cuerpo,
quiero alabarte una vez más, porque Tú has
sido tan bueno conmigo durante todo este día.
Yo me inclino ante ti en señal de rendición,
reconociendo que mi vida depende totalmente de ti.
Padre amado, yo te necesito en mi vida,
sin ti, nada puedo hacer, reconozco mi
debilidad y fragilidad delante de ti.
No quiero caminar sin ti en ninguna
dirección, si Tú no me acompañas no
quiero ir, necesito de tu compañía
y amor en mi vida.
Te amo Padre amado y nunca quiero
alejarme de tu inmenso e infinito amor,
ese que me ofreces cada día a través de
la vida que me das, del aire que respiro,
a través de tus cuidados y bendiciones.
Que no me falte nunca tu amor Padre amado,
acompáñame en todo momento.
Cuando el miedo me persiga, sé Tú mi
salvador, yo me aferro a tus brazos en
cada momento, para sentir la seguridad
de tu protección en mi vida.
Hoy reconozco que los temores vienen a
mi vida de manera constante, muchas son
las veces que pienso en el futuro y porvenir,
pero me invade un temor enorme por querer
saber qué es lo que pasará en los días venideros.
El temor viene a mi vida y roba la paz que Tú
me das, y no me permite disfrutar de todas las
bendiciones que Tú has preparado para mí.
En tus santas escrituras, me invitas constantemente
a no tener miedo, ya que Tú eres quién sostiene
mi vida en tus manos.
En esta hermosa noche, llena mi corazón con
esa seguridad que Tú has prometido para mi vida,
que en todo momento yo pueda experimentar esa
certeza de que Tú estás conmigo, para
protegerme y salvarme.
De que no hay mal que pueda venir a mi vida
a dañarme, porque Tú eres mi escudo y mi
defensor, uno que no puede corromperse
y que es indestructible.
En los momentos de mayor miedo, recuérdame
estas palabras Señor, no permitas que yo olvide
las promesas que Tú me has hecho en tu palabra.
Ayúdame a recordar tu fidelidad, a no olvidar
que cumples tus promesas por amor, que tu
palabra es una garantía de que las cosas serán
tal como las has establecido.
Llena mi corazón de valentía para enfrentar
este mundo lleno de maldad, donde hay
tantas personas que han permitido que
la oscuridad se apodere de sus corazones.
No dejes que el enemigo infunda un temor tal
en mí, que me haga detener, sino que Tú Señor,
fortalezcas mi fe y mi carácter, para pararme
firmemente ante los retos y adversidades de
la vida y, hacerles frente con valentía.
Tú me invitas a esforzarme y ser valiente
cada uno de los días de mi vida, a reflexionar
y meditar en tu santa palabra de día y de noche.
Y a no soltar nunca esa promesa de protección
que me has dado, esa que sé, que vas a cumplir
hasta el último de mis días.
Señor, reconozco que hay temores que son muy
difíciles de superar para mí solo, pero sé, que con
tu ayuda, podré lograrlo, no permitas nunca que
yo me aleje de tu presencia, que me aparte de ti.
Esta noche iré a descansar en tu paz,
confiando en que mientras duermo, mi
espíritu estará conectado con el tuyo.
Que, en tu nombre, hoy tenga una noche
tranquila y de reposo.
Amén.
La valentía se cultiva
No siempre se es valiente, pero lo hermoso de la fe, es que podemos lograr cosas aparentemente imposibles con la ayuda de nuestro Dios. Él quiere bendecirte hoy.