Oración de la noche al Ángel de la Guarda ¡Protégeme!

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Todos los seres humanos tienen la bendición de contar con  la gran misericordia de Dios, quien le asignó un ángel de la guarda a cada uno de sus hijos para que los proteja. Cada uno de estos ángeles de la guarda tiene su propio nombre. Por esta razón es que se debe hacer una oración de la noche al Ángel de la Guarda ¡Protégeme!

Nuestro ángel de la guarda, nos cuida y está a su cargo conducirnos por los caminos de Dios mientras estemos aquí en la Tierra. Debemos pues acogernos a los preceptos divinos para que nuestro ángel de la guarda nos proteja.

Índice()
  1. El Ángel de la Guarda nos brinda siempre su divina protección
  2. El Ángel de la Guarda nos protege de noche y de día

El Ángel de la Guarda nos brinda siempre su divina protección

Ciertamente todos los cristianos estamos cubiertos por la protección de este ángel de la guarda que Dios nos asignó y siempre se encuentra a nuestro lado. Dedícale esta oración de la noche al Ángel de la Guarda ¡Protégeme!

Bendito Ángel de la Guarda,

protector nuestro,

no nos abandones nunca y guía

siempre nuestros pasos por

el sendero de la felicidad.

 

Oh dulce y tierna compañía

que nos asistes en todo momento,

y estás a nuestro lado de noche y de día.

 

Tú que eres creado al igual

que nosotros los mortales a

semejanza del Señor y que

fuiste enviado para ampararnos

y guardarnos de todo mal y peligro.

 

Por favor no nos dejes solos porque

entonces nos perderíamos en

las tinieblas de la noche y

también a plena luz del día.

 

Tú, Ángel Glorioso tienes

todo el poder que Dios

te dio para cuidarnos,

condúcenos con cariño y con

paciencia hasta el fin de nuestros días.

 

También aléjanos de los caminos tortuosos

de la vida y danos siempre

la luz que necesitamos

para vencer las tinieblas del

pecado y de la desobediencia.

 

Asimismo defiéndenos Ángel de luz,

cuídanos y protégenos en todo momento,

que nosotros te reconocemos en

esta vida y también te reconoceremos

en el más allá para estar siempre

agradecidos de tu esmero

para con nosotros.

 

Por las noches cuando estemos dormidos,

 vela nuestros sueños y no permitas

Ángel glorioso que seamos

abordados por los espíritus del mal.

 

Igualmente vela pues nuestros pensamientos

aunque estemos dormidos y danos

un sueño reparador y bien

encaminado hacia un hermoso

y feliz despertar.

si hay un angel que sea mediador

Cuando salgamos a la calle

protégenos y líbranos de todos

los peligros que puedan asecharnos,

 aleja pues de nosotros

las malas amistades.

 

Por favor evita que tengamos contacto

con personas de mala vibra que

puedan darnos malos ejemplos

y torcer nuestros pasos.

 

Toma tú las riendas de nuestra

vida y bendícenos en todo momento

para que seamos dignos hijos de Dios.

 

No importa la edad que tengamos,

aunque lleguemos a ser

personas maduras,

te pedimos ángel de la guarda

que nos veas como niños

de pecho y no permitas que

hagamos nuestra voluntad.

 

Antes bien haz que nos parezcamos

a nuestro Señor Jesucristo,

quien no pudo ser quebrantado

en la fe y en la fidelidad a

su Padre Celestial cuando fue

tentado tantas veces por Satanás.

 

Haznos fuertes de espíritu,

danos sabiduría, llena nuestros

corazones de amor hacia el prójimo

y que seamos buenos hijos,

buenos cónyuges y buenos padres.

 

Haz que ayudemos siempre

a nuestros semejantes

y que aprendamos a cuidar

de nuestro cuerpo que

es un templo divino,

apartándonos de los vicios

y de las malas costumbres.

 

En esta noche y en todas las

noches que nos quedan por vivir,

antes de partir de este mundo.

 

Ángel de la Guarda,

estate siempre a nuestro lado,

cumpliendo con el mandato

de Dios cuando te envió a cuidar

de nosotros en todo momento.

 

Finalmente no permitas pues que las entidades

siniestras tomen cuerpo en

nuestras acciones ni que

puedan desviarnos

del camino del bien.

 

Amén.

El Ángel de la Guarda nos protege de noche y de día

Ciertamente de noche y de día como los latidos de nuestros corazones que no cesan, desde el mismo momento de nuestro nacimiento. Hasta el día de la partida con el Señor, los ángeles de la guarda cumplen con la misión que les fue encomendada por el Creador del universo y de toda creatura viviente.

Por tal motivo no debemos dejar de invocarlos por las noches antes de dormir y pedirles que nos proporcionen un sueño profundo y reparador. También al despertar debemos darle las gracias y pedirles que guíen cada uno de nuestros pasos dentro y fuera del hogar.

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