Oración efectiva a San Alejo para separarme de mi esposo que me causa daño
Las relaciones de pareja no son algo muy fácil de llevar. Dos personas con distintas costumbres, diferentes formas de pensar y de personalidades diferentes conviviendo bajo un mismo techo. Amerita de mucha tolerancia y comprensión y más aún cuando han decido casarse y formar una familia. Es posible que lleguen a faltar al compromiso de esposos y que alguno le haga daño al otro. Te presente hoy la Oración efectiva a San Alejo para separarme de mi esposo que me causó daño.
Por diferentes razones sucede que en la pareja alguno tiende a cometer errores que fracturan la relación. Puede entonces darse el caso de herir tanto física como emocionalmente a la otra persona hasta sin intención alguna. San Alejo, es un Santo muy humilde y bondadoso. Quien alejó de su vida las riquezas y bienes por convertirse en un mendigo y dar de las limosnas que recibía a los demás.
Oración a San Alejo para aliviar tus penas y consolar tu alma
El ejemplo de pobreza y humildad que San Alejo nos enseñó lo convirtió en un Santo milagroso. Excelente intercesor ante los pedidos que necesitamos hacer a Dios. Puede ayudarnos en cualquier petición que queramos hacer y nuestra devoción hacia él nos mantendrá siempre bajo esa protección divina que necesitamos.
Si has tenido alguna mala experiencia con un esposo que haya causado dolor a su mujer o es tu caso particular. Has soportado ya algunas otras situaciones parecidas de la misma persona y has perdonado para intentar superarlo juntos, pero no vez solución. Entonces entrega esta Oración efectiva a San Alejo para separarme de mi esposo que me causó daño y con ella la misión de alejarlo de tu vida.
Bendito Mi San Alejo.
Santo maravilloso de mi devoción, humilde
hombre de gran corazón, sencillo y puro ser al
servicio de los más desvalidos, glorioso santo
que salvas vidas y purificas almas.
Por eso te amo y te sigo desde que mi corazón se
llenó de tu gracia divina.
Porque eres mi más adorado pensar, pues cuando
me desligo del mundo terrenal y sus
maldades para refugiarme en la oración,
siento que tu espíritu entra en mi me llena de
una santa paz que no puedo comparar con
nada.
A veces quisiera no salir de ella y reposar allí
por mucho tiempo. Pero las responsabilidades
me esperan y hay una vida que debo
enfrentar.
Además sabes del amor hacia mi esposo y mis hijos.
Sabes que he sido tolerante y paciente ante
las terribles situaciones que he tenido que
pasar.
También conoces cada una de las lágrimas que he
derramado y que he puesto mi otra mejilla
como ejemplo de la palabra de Jesucristo.
Óyeme, Escúchame, ya no creo soportar
más, he padecido en carne propia los
maltratos de mi esposo, me ha herido y hecho
mucho daño y ya no hay más tiempo para
perdonar y olvidar.
Por eso hoy vengo a suplicar ante ti su distancia y
lejanía, no quiero tenerlo más a mi lado,
he sido víctima de sus malas atenciones,
no es el mismo hombre de quien me
enamore.
Asimismo temo por mi vida y la de mis hijos,
pues, así como me ha herido puede hacerlo
con mis pequeños.
Ya que por más que he intentado acercarlo a ti mi
Santo Adorado, acercarlo a Dios y a Cristo,
ha sido imposible que escuche mis palabras.
Y no quiero tenerlo más a mi lado, aléjalo,
apártalo, sácalo de mi vida no quiero verle
más.
Mientras tanto tú que tienes
el poder de alejar lo malo que
rodea a los hijos de Dios, te pido que alejes
de mi vida a mi esposo,
Por último San Alejo de mi vida,
te pido que lo alejes de mi corazón,
para que no pueda hacerme más daño
y que esta separación sea definitiva.
Amén.
Poderosa oración compañera de las penas
La oración no solo es buena para pedir o agradecer. Es simplemente un mecanismo para conectarnos con ese poder espiritual que permite llenar de paz y tranquilidad nuestras almas. Permite que Dios pueda escucharte y consolarte, te dará los mejores consejos y fortalecerá tu espíritu en la fe de la gracia divina.
No decaigas y deja en manos de San Alejo la distancia que pides de ese ser perturbador. Él llevará tu clamor y socorrerá tu alma, ten paciencia y mucha fe.