Oración de la noche del martes 17 de Agosto
¿Quieres que Dios cumpla los deseos de tu corazón? Haz click aquí y habla con Él, por medio de esta oración. Sin embargo, es necesario nutrir el espíritu que habita dentro de nosotros, para que estos deseos sean de bien y traigan bendición.
Concede los deseos de mi corazón, Señor
Cuando en la mañana estés en intimidad con Dios, abre tu corazón libremente para que Él conozca por tu boca, que es lo que realmente sientes y quieres. Esto ayudará a organizar tu vida y a empezar nuevos deseos que satisfagan las necesidades del ser y no de la carne.
Escucha, Mi Bendito Dios,
la voz de mi plegaria, esta
noche en la que clamo a ti.
Eres Tú el rey de reyes y el
señor de señores, eres Tú
la fuerza que mantiene a los
mares sujetos y el que indica
al viento como y donde moverse.
Mi alma te alaba y a tu nombre
rinde pleitesía, todos los días
de mi vida Tú estás en mi mente.
En esta noche me dirijo a ti
para alabarte y darte gracias,
por el día vivido y el amor que
me has manifestado siempre.
Oh, gran Dios, Me has escuchado
en mis momentos de conflicto y
ruego que tu oído se incline hacia
aquellos que claman tu nombre.
Para que tú, Mi Dios, envíes ayuda
tal y como hiciste conmigo en
los momentos de aflicción.
Te ruego, grandioso padre,
que Tú hagas memoria de mis
ofrendas y aceptes las oraciones
y alabanzas que con amor hago hoy.
En esta noche, te pido que me des
conforme a los deseos de mi
corazón y cumplas los sueños
de mi alma, Mi Señor.
Yo reconozco que Tú salvas
a los que en ti creemos,
y donde sea que estemos
tu oído nos escucha y tu amor
nos responde llenándonos de paz.
Con la fuerza poderosa de tu diestra,
Tú me has protegido, Señor.
Y yo confío en tu nombre.
Te ruego, Dios de Israel,
que guardes mi memoria
para acordarme siempre de
tu misericordia y de tu amor.
Te doy gracias, Padre amado, por
el alimento que no faltó a mi
mesa el día de hoy.
Te doy gracias porque
tu cuidado estuvo conmigo
y con mi familia siempre.
No nos desamparas nunca, mi
alma te agradece y te adora.
Gracias también por los
momentos en los que
tuve miedo y Tú me
diste fortaleza.
Gracias, por ser el
refugio de mi alma y la
roca en la cual yo puedo
sostenerme en todo tiempo.
Te agradezco, porque hoy vi
como tu diestra dirigía mis pasos.
Eres mi refugio, Mi Dios. Y te
ruego que lo sigas siendo
durante toda esta noche.
Te pido perdón, por los actos
cometidos que fueron
desagradables para ti.
Perdona mis pecados, aquellos
que hice conscientemente
y los que no fueron hechos de
forma consciente.
Perdóname Dios,
porque por medio de
tu perdón yo estaré limpia.
Y gracias a tu misericordia yo
sabré perdonar a las personas
que me han hecho mal y han
pecado contra mi sin motivo.
Pon en mí, ese espíritu
misericordioso que me
ayude a entender a los demás.
Que yo pueda perdonar a aquellos
que en mi contra se levantaron,
y que el deseo de venganza
yo pueda colocarlo en
tus manos para que
Tú seas quien haga.
Alabo y bendigo tu
nombre, Santísimo Dios.
Te entrego en este momento mi
noche, rogando que en tu
infinita misericordia me
proveas de un agradable
descanso y de un sueño
reparador y completo.
En el nombre de Jesús.
Amén.
¿Cómo alinear mis deseos a la voluntad de Dios?
Esto es algo que realmente se da solo; el contacto directo con Dios, el inmiscuirse en su palabra y estudiarla, el orar frecuentemente, son acciones que sin darte cuenta van a producir cambios en tu interior al punto de empezar a desear cosas que están bajo la voluntad del padre.