Oración de la noche del 28 de Marzo
El momento de la noche ha llegado y con ella una nueva oportunidad de presentarte ante Dios para que Él llene tu noche de su paz. Entra a esta notificación para que Dios llene tu mente y corazón de su paz, expulsando todo pensamiento que esté trayendo preocupación a tu vida.
Dios te da una paz que el mundo no puede darte
Él ha prometido en su palabra, que la paz que Él puede darte es muy difícil de entender para la mente humana, pues aunque estés atravesando miles de problemas, Él mantendrá tu corazón tranquilo y confiado en que todo estará bajo su control.
Dios de mi vida y de mi corazón, una vez más
me presento delante de tu santa presencia en
este día que está por terminar.
En este momento de quietud, cuando ya el día
termina y da paso a la noche, yo quiero presentar
mi ser delante de ti.
Tú has permitido que yo hoy tuviera un día más
de vida, lleno de experiencias y bendiciones que
habías preparado para mí.
Yo quiero agradecerte por esas bendiciones
que has derramado sobre mi vida en este día.
Te pido, Señor de mi corazón, que me ayudes a
aprovechar cada una de ellas al máximo.
No permitas que mi desobediencia sea
un impedimento para que yo pueda seguir
recibiendo de tus exquisitas bendiciones.
Enséñame a ser obediente cada día a tu
palabra, para así poder caminar por el
camino que Tú has diseñado para mi vida
y poder cumplir tu voluntad y propósito.
Padre de la gloria, en esta noche quiero pedirte de
corazón, que vengas a mi vida y me llenes de mucha
paz, sea cual sea la situación que yo esté atravesando
en este momento de mi vida, yo te ruego que esa paz
que le has prometido a tus hijos, hoy se haga parte de
mi vida y me llene de tranquilidad.
Señor amado, que a pesar de las adversidades que
deba enfrentar, mi alma esté confiada y tranquila
de saber que Tú tienes el control de toda situación.
Amado Dios, en esta noche yo confío en tu promesa
y creo que nada de lo que pueda pasar a mi alrededor
me puede dañar, pues Tú me defiendes y me proteges
para que nada malo me ocurra.
Quiero vivir cada día con esa paz que solo Tú sabes
y puedes dar, porque fuera de ti no puedo encontrar
la calma para mi vida, este mundo solo me ofrece
preocupaciones y tribulaciones diariamente.
El único que me puede llenar de paz y felicidad
eres Tú, mi Dios, y la paz que Tú das es eterna,
el mundo con sus decepciones no puede robarme
la calma y la confianza que Tú has depositado en mí.
Yo en esta hora de la noche no me iré a descansar sin
antes soltar delante de ti cada una de las cargas de mi
corazón, yo me despojo de todo el peso que hay en mi
alma y te pido, Señor, que me des ese consuelo que solo
en tu presencia puedo encontrar.
No podré descansar si Tú no quitas de mi vida el
peso que me impide tener un corazón confiado
en tu control sobre mi vida.
Así que yo abro mi ser ante tu presencia para
que vengas y traigas esa paz que va contra todo
pronóstico, esa paz que no depende de que las
cosas a mi alrededor estén en calma.
Sino que hace que todo dentro de mí esté
en calma, aunque el mundo a mi alrededor
se esté derrumbando, yo no quiero confiar
en otra persona ni en otro ser que no seas
Tú, mi Dios amado.
Sé que solo en ti podré encontrar esa seguridad
que necesita mi vida para permanecer confiado
a pesar de las circunstancias.
Yo descanso en ti, mi Señor, te doy a ti el control
de mi vida y dejo esta noche mi corazón en tus
manos poderosas y protectoras.
Amén.
La paz de Dios no depende de las circunstancias
Dios te da una paz que no obedece a las circunstancias, sin importar lo que esté pasando a tu alrededor, Dios te llenará de su paz y nada nunca podrá robártela.