Oración de la noche del lunes 5 de Julio
Antes de ir a descansar de esta noche, entra a esta notificación para hacer una especial oración por la madurez espiritual, esa etapa de nuestra vida donde comenzamos a ver y a interpretar gran parte de nuestro mundo, de manera diferente.
Todos debemos llegar a la madurez espiritual
Lo natural es que todos maduremos espiritualmente, sin embargo, hay factores que impiden que esa madurez llegue, es aquí donde debemos presentar nuestra vida a Dios en oración y permitir que Él, comience esa transformación en nuestro espíritu.
Alabado Padre celestial, Dios y rey del
universo entero y de todo lo que en
él existe, te doy a ti la gloria, la honra
y toda mi adoración.
Me presento una noche más a ti, mi Dios Santo,
para adorarte con mi corazón, con mi alma
y mi espíritu, reconociendo que Tú eres el Dios
único y verdadero, quien me ama por encima de todo.
Esta noche bendigo tu nombre, porque Tú no me
juzgas por mis errores, sino que me aceptas,
me brindas tu perdón y amor incondicional,
también me disciplinas y me enseñas con amor,
el camino correcto que debo andar.
Pero siempre es tu amor el que guía cada
una de tus enseñanzas para mí, te amo
y bendigo tu amor hacia mí, que me hace
sentir tan único y especial, que no quiero
apartarme ni un segundo de ti.
En esta hermosa noche que tengo,
quiero presentar ante ti mi vida, Señor,
yo quiero rogar para que Tú hagas de mí,
un hijo tuyo que goza de un espíritu fuerte.
Yo quiero pedirte, Señor, con toda humildad en
mi corazón, que Tú me ayudes a tener cada
día más madurez espiritual, dame un espíritu
fortalecido por ti, necesito en mi vida un
crecimiento más grande en mi ser.
Enséñame a dejar de querer cambiar la
vida de las demás personas, dame la fuerza
para dejar de ver sus defectos, y de esta
manera comenzar a ver los míos.
Muéstrame aquellas cosas que debo cambiar en mí,
qué hábitos debo dejar y cuáles debo desarrollar,
las costumbres que no me dejan salir de mi
condición actual, y aquellas cosas que debo
conservar de mi personalidad.
Quiero aceptar a las personas tal como son
sin juzgarlas, si emitir comentarios de
juicio hacia ellos y sin que mi corazón
se predisponga antes de conocerlos.
Enséñame esta noche, a soltar aquello que no
me hace bien, pero que hasta el día de hoy
no he querido dejar ir, hazme entender
qué es lo mejor para mí, y qué debo
dejar ir de mi vida.
Llévame a una madurez que me haga saber,
que no debo tener expectativas de las
personas que están cerca de mí, porque
ellos no viven para complacerme.
Señor hazme entender, que el amor que
demuestro a las personas que amo,
debe ser desinteresado y sin
esperar nada a cambio.
Que mi retribución, sea el placer de ver a
las personas a mi alrededor disfrutando
de lo que soy, y de tu transformación
en mi vida entera.
Amado Dios, ayúdame a tener la madurez
para dejar de buscar la aprobación de las
demás personas, solo debe ser importante
para mí, tu aprobación y tu bendición en mi vida.
Te ruego, que me enseñes que hay cosas que
son muy importantes y que debo hacerlas,
pero que hay otras que no lo son y que no es
sabio gastar mi fuerza y energía en ellas.
Que no son fundamentales para mí, y que no
pasará nada malo si dejo de preocuparme por ellas.
Enséñame a estar en paz conmigo mismo,
quiero aprender a amarme y a cuidarme,
de esta manera, poder comenzar a amar
a las personas que están a mi alrededor.
Amado Dios, a partir de esta noche dejaré
de compararme con otras personas, porque
Tú me has hecho único en este universo y
no hay nadie que sea como yo.
Amén.
La madurez espiritual es un proceso
No hay tal cosa como llegar a la madurez espiritual, sino que esta es un proceso constante en nuestra vida, poco a poco Dios nos muestra a través de su palabra, cuáles son las cosas que debemos ir cambiando y dejando atrás.