Oración a Dios por un padre enfermo ¡Ayúdalo a salir de esta!
Esta oración hará que Dios te conceda la sanación de tu padre enfermo, ayúdalo tú realizando esta plegaria por su salud. Ese amor por nuestros padres es genuino, porque siempre han estado acompañándonos en cada etapa de nuestras vidas. Por eso, cuando algo les pasa, te sientes angustiado y deseas su pronta sanación.
Es que incluso aquel padre o madre que, no acompaño a sus hijos, merece que estos hagan una plegaria por ellos. Porque, en definitiva, no existirías si no te hubiesen dado la vida, ya del resto Dios se encargará de juzgarlos. Independientemente de eso, te recomiendo que los bendigas y le pidas a nuestro Creador por su amparo.
Oración a Dios por un milagro de sanación para tu padre enfermo, ayúdalo pidiendo por su recuperación
Todo lo que pidas de corazón te será concedido, es por ello que esta oración es eficaz para implorar a Dios por un padre o madre que este enfermo, decaído por dolencias del cuerpo o con alguna grave enfermedad.
“Dios en esta oportunidad,
vengo a pedirte por la salud de mi padre,
ya que se encuentra débil y enfermo,
casi sin fuerzas para seguir.
Por eso de esta forma recurro a ti,
en rogativa para su recuperación,
restablece su salud, ayudalo por favor.
Se encuentra adolorido,
eso me parte el alma, saber que sufre,
permítele recobrar sus ánimos,
su espíritu ha sido siempre fuerte y luchador.
Mantenlo acá conmigo Dios,
nunca se es suficientemente grande,
menos para ver partir un padre.
En consecuencia, te suplico,
restaura en su cuerpo su salud,
que su organismo funcione nuevamente,
de manera correcta, que todo se cure.
Que la poderosa sangre de Cristo lo cubra,
arrancando todo mal, toda mala energía,
asimismo, que le otorgue sanidad,
desde su cabeza hasta los pies.
En consecuencia, declaro a mi padre,
en total sanidad por intercesión divina,
los Ángeles me lo guardan en todo momento.
Virgen de la Candelaria, a ti mi súplica,
Por favor intercede para que mi padre enfermo,
sea salvo, para que su espíritu nuevamente,
sea regocijado como ha sido siempre.
Para que este junto a nosotros,
por mucho más tiempo, Bendícelo Señor.
También, para que no le queden secuelas.
Te imploro especialmente,
por todos aquellos padres que,
se encuentran en mal estado,
que sus hijos les cuiden a ellos.
También que cuenten con medicinas,
con una alimentación adecuada,
que les permita mejorar.
Del mismo modo, esta rogativa a Dios,
es para aquel padre enfermo, que no,
tiene quien lo cuide, para que la soledad,
no les consuma con la tristeza.
En consecuencia, para estos últimos coloca,
a tus Guardianes de protección, a los terrenales,
que son tus instrumentos para ayudar,
al necesitado y al desamparado.
A todas aquellas misiones cristianas,
que se dedican a esta noble causa,
de ayuda humanitaria a padres o madres,
ayúdales Padre a conseguir sus propósitos,
a quienes contribuyan a su causa.
Finalmente, en esta corta oración,
te imploro que, ayudes y no desampares,
a un padre enfermo, sostenlo e ilumínalo.
También dales fuerzas a sus cuidadores,
para que lo hagan de forma esmerada,
con amor, sin renegar de nada.
Concédenos pues fortaleza.
Física y espiritual, ya que luchar,
con enfermedades no es fácil, más cuando,
se trata de personas mayores.
Esperando en ti Dios, en tu obra de,
sanación para mi padre enfermo,
es esta mi oración, en ti confío.
Amén.
¿Qué dice la Biblia sobre la sanación de enfermedades?
Esta oración a Dios es importante, para que un padre enfermo recobre la salud. Ayúdalo además espiritualmente, con el acompañamiento durante su convalecencia. Recuerda que, dentro de las enseñanzas está escrito que es Dios quien restaura al que está quebrantado de salud. Igualmente, que además es necesario ese apoyo moral, ese acompañamiento en el proceso de recuperación.
Nuestros padres lo dieron todo por cuidarnos, hagamos entonces nuestro mejor esfuerzo para retribuirles, de manera alegre y sin asumirlo como cargas. Es algo común que los hijos discutan por quien será el cuidador o por quién da más o menos en un estado de necesidad. Sin embargo, te invito a que revises las escrituras y te des cuenta, es un deber de todo hijo cuidar a sus padres, según mandato de Dios.