Oración de la noche del viernes 10 de Septiembre

Oracion de la noche del 10 de septiembre

Haz clic en este enlace antes de irte a dormir para realizar la oración de la noche del 10 de septiembre y recibir a Dios en tu corazón.

Índice()
  1. Santo Padre, te ofrezco mis alabanzas y mi sueño
  2. Finaliza tu día al lado de Dios y agradécele por todo lo sucedido

Santo Padre, te ofrezco mis alabanzas y mi sueño

A través de la siguiente oración, vamos a colocarnos bajo la protección de Dios para dormir en sus brazos con su paz celestial en nosotros y tener así una noche de sueño renovador.

Santo Padre, rey supremo del cielo y de la tierra,

ahora que la noche ha llegado, vengo a hablar

contigo una vez más desde lo más profundo de

mi corazón y a agradecerte por todo lo sucedido.

 

En este momento de oración, me inclino ante ti

para recibir tu santa presencia aquí en mi hogar.

 

Te bendigo porque eres santo, porque hoy te has

quedado a mi lado en todo momento, me alejaste

de todo peligro y me diste tus sabios consejos.

 

Ahora que el día llega a su fin y con ello la hora

del descanso, te pido que me concedas esta

noche, poder dormir en tus brazos amorosos,

renovar y fortalecer mi cuerpo, mente y espíritu.

 

Te doy las gracias por todo lo que ha sucedido en

el día de hoy, por los instantes de plenitud, los

de gozo a tu lado y los momentos compartidos

con mis seres queridos.

 

Te agradezco por las enseñanzas de hoy, porque

estuviste a mi lado siendo mi guía y brindándome

tu apoyo incondicional cada vez que te necesite.

 

No quiero olvidarme de darte las gracias por mi

hogar, porque tengo un techo donde refugiarme

hoy y por las personas increíbles que me rodean.

 

Oro por todas las personas que no tienen un

techo esta noche, porque los guardes bajo tus

alas, les des tu refugio y el calor de tu amor.

 

Quiero darte las gracias por la comida has puesto

en mi mesa, porque a través de ellos mi cuerpo

 y mi alma se alimentan y se fortalece mi fe en ti.

 

Rezo por mis seres queridos para que nunca les

falte un techo en donde refugiarse del peligro,

una cama para descansar por las noches y un

plato de comida en sus mesas todos los días.

 

Rezo por las personas que están hambrientas,

para que sean alimentados con el pan de vida.

Señor me inclino ante ti

En este momento de oración quiero disculparme 

por los pecados que he cometido hacia ti y hacia

mis hermanos, no fue mi intención ofenderte.

 

Por favor, Padre, Tú que eres misericordioso, ten

piedad de tu hijo y concédeme la oportunidad

de poder redimirme y servirte con humildad.

 

Rezo porque los errores que hoy he cometido los

tenga siempre presente en mi mente, no como

algo negativo, sino para aprender de ellos y así

no volver a cometerlos nunca más en el futuro.

 

Esta noche, concédeme un descanso

renovador, para fortalecer mi cuerpo y alma

y así, enfrentarme con más ánimo al mañana. 

 

Intercede por mí ahora y siempre, por favor, no

permitas que me aleje de tu lado ni que vuelva a

caer en el pecado y tentaciones mundanas.

 

Protege también a todos mis seres queridos, que

puedan descansar con tu paz celestial, tu gracia,

tu gran amor y tu abundancia en sus corazones.

 

Esta noche mientras duermo, ven a mí, Padre,

y háblame al oído con tu dulce voz, para que

pueda escuchar todo lo que tienes para decirme.

 

Oro porque pueda escuchar tus sabios consejos,

sobre todo en mis momentos de dificultad, que

no me deje llevar por mis emociones, que pueda

actuar correctamente y conforme a tu Palabra.

 

Esta noche me coloco en tu lado más sagrado,

guárdame de todo peligro, por favor, te lo pido.

 

Mientras me recuesto bajo tus alas protectoras,

te ofrezco mi sueño y te pido que me cobijes.

 

Oro porque esta noche pueda descansar en ti, y

que sea una noche de revelación y renovación.

 

Amén.

Finaliza tu día al lado de Dios y agradécele por todo lo sucedido

Antes de irte a dormir, ve al encuentro con Dios y háblale desde lo más profundo de tu corazón. Él te estará escuchando y atenderá tu llamado, pues conoce nuestros anhelos, preocupaciones y necesidades y siempre nos responde.

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