Hermosa letanía a nuestra Señora la Virgen María

En principio, debemos saber que la letanía es un diálogo en el cual se hacen súplicas por algún motivo en específico, también son invocaciones breves dedicadas a Dios o un santo. La preciosa letanía a nuestra Señora la Virgen María nos muestra que la Santa Virgen María puede responder cada una de nuestras súplicas, ya que es nuestra intercesora.
https://www.youtube.com/watch?v=B3PLyKiS7lc
Las letanías a la Santísima Virgen María solo se recitan cuando se llega al final del Santo Rosario, puede ser al final de los 5 misterios o al final de los 15 misterios. Si no se pueden hacer a los 15 entonces es válido a los 5, pero la Santa Virgen hace énfasis en que se hagan todos.
Santísima Virgen María recibe esta hermosa letanía
Por lo cual, las letanías se recitan en cualquier lugar y momento, pero son más que todo dedicadas al Santo Rosario de nuestra Virgen María. La inigualable letanía a nuestra Señora la Virgen María puede llevarnos a un nivel espiritual muy elevado dando como resultado una respuesta de parte de la Santa Virgen María.
Señor ten piedad,
de nosotros,
quienes hoy te invocamos
esperando solo en ti.
Cristo Jesús Señor nuestro,
de todas formas padre de todo lo que existe,
hijo por excelencia,
misericordioso.
Oh Cristo óyenos,
no apartes tu oído,
resulta que en este momento te necesitamos
de nuestro lado Señor Dios.
Durante mi letanía escucha nuestras súplicas,
presta tu oído Santísima Virgen,
para escuchar cada súplica
que se hace con devoción.
Ahora escucha Santísima Virgen
el clamor de tus fieles,
aquí estamos prestos a tu servicio.
Entonces Dios, Padre Celestial,
imploramos ¡apiádate de nosotros!
todos los días ten misericordia.
Hijo redentor del mundo,
asimismo escucha nuestras oraciones,
no permitas que a nosotros
llegue la maldad.
Del mismo modo protégenos cada día,
cada momento y lugar,
estemos donde estemos
guárdanos del mal.
Durante este tiempo santísima trinidad
los cuales son solo uno,
Poderoso y Glorioso Señor,
Dios de todos y todo.
Gracias por concederme
cada día en victoria,
el cual tengo a medida
que puedo caminar para ti.
Santa María
ruega por nosotros,
igualmente por los desvalidos
todos los humildes de corazón
a ti clamamos por tus milagros.
Desde ya espero tu respuesta,
mantengo esta palabra,
no desmayaré hasta obtenerlo,
sé que me oyes.
Por consiguiente, eres Santa Madre de Dios,
Virgen de las Vírgenes,
pura y santa ante todas,
tú eres la madre del hijo de Dios.
Eres la madre de Jesús,
de ese hombre que murió,
asimismo en aquella dolorosa cruz
para poder darnos perdón.
Tu hijo dio su vida
por obedecer al padre,
igualmente para así no condenarnos,
y a través de Jesús
obtenemos misericordia.
Madre pura y Santa,
por lo tanto Santa Madre de la gracia
purísima, ante todo,
Madre Santa de Jesús.
Asimismo eres santa y pura,
todos te veneran
porque eres
la madre de nuestro
salvador Jesús.
En ti no hay mancha,
asimismo por tu pureza
Dios te escogió para llevar
en tu vientre a nuestro Señor.
Gracias por tus milagros,
igualmente por la manera de escucharnos
todos los días presta para nuestras súplicas.
Por tanto, eres nuestra intercesora
ante Dios para limpiarnos
de todo pecado que nos aleje
de la sagrada presencia de Dios.
Asimismo, sufriste el dolor más grande
el cual es ver morir un hijo
de la peor manera, sin poder
hacer nada para ayudar.
Nunca abandonaste a tu hijo
así como nunca nos abandonas,
de tal manera siempre nos acompañas,
para guiar nuestros pasos.
Permite podamos siempre
estar íntegros ante Dios,
asimismo que nunca nos falte
de tu gracia y amor.
De igual forma queremos seguir tus pisadas
para llegar donde esté Jesús,
por tanto verle cara a cara tal como es,
puro sin manchas ni pecado.
En su trono al lado de Dios
lleno de majestad y gloria,
recompensa del padre
por haber cumplido aquí en la tierra.
Además Madre Santa de Jesús,
llena de gloria eres sobre ti está el poder
el cual Dios te da para responder
nuestras oraciones.
Para finalizar, gracias por estar siempre
acompañándonos para lograr llegar
ante nuestro Dios, puros y en santidad.
Amén.
¿Cómo pedir grandes milagros a la Santa Virgen María?
Finalmente, cada diálogo o suplica que se quiera hacer a la Santa Virgen María por perdón, purificación o sanidad, se encuentran en esta hermosa letanía a nuestra Señora la Virgen María la madre de nuestro Señor Jesús el hijo de Dios hecho carne. Las letanías son muy frecuentemente usadas para los Santos Rosarios de nuestra Santa Virgen María.