Oración a San Expedito para rogar por mi bien y que me ayude en todo

Estar bien, debería ser una característica indiscutible en la vida de todos, lamentablemente, el mundo en el que nos encontramos en la actualidad, está plagado de situaciones tensas y problemáticas que nos quitan la tranquilidad. Una oración para San Expedito rogando que nos ayude, resulta en un elemento infalible para conseguir serenidad y por ende, estar bien, sobre todo siendo dirigida a este santo, quien se caracteriza por ayudar en situaciones urgentes y causas que parecen imposibles.
Cuando se trata de nuestro día a día, ya sea en el ámbito laboral, familiar o incluso intrapersonal, somos sometidos a mucho estrés, sentimos que el mundo se nos pone de cabeza, tal vez porque nos agobia toda la responsabilidad que cargamos. Siempre necesitaremos ayuda para sobreponernos a lo adverso y es por eso que San Expedito será un fiel aliado en nuestro combate diario.
Oración para pedir a San Expedito que me ayude
Santo protector y patrono de los desesperados siempre llegará a nosotros con soluciones a cualquier problema que enfrentemos. Si queremos ayuda para que el bien siempre esté presente, con la siguiente oración podremos pedir su intervención, para que tomando nuestra mano nos encamine correctamente, evitando en la medida de lo posible, todo obstáculo y elemento que nos quite la paz.
A nuestro Creador pido apoyo,
si me es permitido espero obtener bendiciones,
la intervención divina me es necesaria.
Oro porque puedas concederme un grato honor,
el de tener a mi lado a uno de tus Santos,
Expedito el legionario.
San Expedito bendito,
abogado de los desesperados,
eres tu mi referente de paz.
Hasta en lo difícil encuentras salida,
hasta en lo imposible haces brillar lo posible.
Quién mejor que tú para ayudarme,
en una realidad que encuentro pesada,
realidad que mis hombros no soportan.
Llegas valientemente a quitar
de nuestro camino lo malo,
batallando contra lo que no vemos.
Aun así reconocemos tu perenne poder.
El bien es elemento vital para la tranquilidad,
por ello te pido que me favorezcas,
que me llenes de lo necesario
para encontrar la opción indicada,
opción que me evitará mucho desasosiego.
Aleja de mí todo lo tóxico,
sea lo que sea,
malos hábitos e incluso personas.
Que a mis pensamientos sólo llegue lo bueno,
lo positivo y lo que aporte cosas productivas.
Muy importante resulta también
que envuelvas a mi familia en tus acciones,
en ellos recaen mis mayores preocupaciones.
Elimina de mí todo rencor,
eso sólo envenena mi alma y mi pensar,
quiero inspirar amor,
bondad y humildad.
Quiero perdonar y dejar fluir,
que lo malo continúe
y que quede lo que me favorezca.
Perdonar es un tema indispensable,
es muy difícil, dentro de mí guardo dolor
que me fué causado por algunas personas,
pero no podré seguir adelante si no perdono.
Déjame cumplir con lo que Cristo nos predicó,
amar al prójimo y colocar la otra mejilla.
Sin embargo, espero no tener que soportar mucho más.
Te lo ruego San Expedito,
a ti y a nuestro Señor.
Amén
Estar bien en los distintos aspectos de la vida
Decir que queremos estar bien, puede ser algo sumamente ambiguo, ya que hay tantos aspectos en los que podríamos encontrarnos bien o mal. Obviamente podemos referirnos a algo general y es que deseamos que en todo se nos pueda ayudar, en este caso que San Expedito se adentre en toda nuestra vida para que arregle lo que sea que esté mal. Pese a que deseamos que la oración sea algo generalizado, no podemos esperar a que se solucione todo.
Si en algún punto muchas cosas mejoraron, pero hay un factor vital de intranquilidad que persiste, llegaríamos a pensar que la oración no funciona, pero la realidad es que se han arreglado muchos problemas tan pequeños que no se notan por lo grande que ese factor resulta. Es por ello que sería recomendable que antes de pedir cualquier cosa, evaluemos y veamos qué problema es el más grande, para así enfocarnos primeramente en él. Notaremos el cambio.