Oración a la virgen de Guadalupe para un buen negocio ¡Y que sea próspero!
La bondad de la virgen de Guadalupe es grande. Siempre que tengamos fe y cultivemos el amor en nuestros corazones, ella nunca nos olvidará. Sobre todo, cuando lo que pedimos es para hacer el bien. Por ello, te dejaremos una maravillosa oración a la virgen de Guadalupe para un buen negocio.
Podemos pedir a la virgen de Guadalupe para que nos ayude a emprender y tener éxito en los negocios. Nuestros emprendimientos estarán protegidos por ella cuando estos sean bien habidos.
Pidamos con esperanza, oremos con el corazón y la mente abierta para escuchar su voz y seguir el camino que nos presente. Nuestra Virgen de Guadalupe guarda para nosotros los mejores deseos y pone su empeño para que sus hijos progresen.
Oración a la virgen de Guadalupe para un buen negocio
Los negocios son iniciativas que requieren trabajo, esfuerzo y concentración. Cuando tenemos disciplina podemos alcanzar la prosperidad deseada. Si a esta conducta la acompaña la fe y la oración a la virgen de Guadalupe, no dudes que la prosperidad te alcanzará sin darte cuenta.
Entrañable virgen de Guadalupe,
madre de Jesús hijo de Dios,
tu que iluminas el universo con tu luz.
ante todo, perdona mis pecados.
Reina madre del mundo,
límpiame el corazón de sentimientos impuros,
que tu maravillosa luz sagrada
acompañe mis días y bañe de bendiciones
a mi familia y mis seres queridos.
Que ellos también sean perdonados
para que el bien reine en sus corazones
y los acompañe en todos sus actos
en este mundo terrenal.
Por ese amor que nos profesas,
por ese amor de quienes en ti confiamos,
hoy te vengo a pedir, santa madre, tu bendición.
Bendice mi negocio,
coloca sobre él tu mano santa,
para que pueda brindar los frutos esperados.
En ti confió madre, para que este emprendimiento
alcance la prosperidad y con el,
pueda satisfacer las necesidades materiales
de mi familia y seres queridos.
Por ello, te pido con humildad que me
ayudes a alcanzar el éxito,
que me acompañes en este camino,
para que sus resultados
podamos disfrutar con tranquilidad.
¡Oh poderosa virgen de Guadalupe!
Reina madre de la inmensidad
que brillas en las alturas junto a Dios padre.
Hoy te ruego que apartes de mí negocio
la maldad de los envidiosos.
Cierra su paso y pon amor en su corazón.
Intercede con tu escudo protector
para que los rencorosos y descarriados
no se acerquen a saquear la obra de mi trabajo.
Santa madre misericordiosa,
por ellos también te pido,
cúralos de la maldad
y llévalos por el buen camino.
Alberga este ruego,
¡oh santa virgen madre de Dios!
Escucha mi suplica que hoy elevo ante ti.
Pongo todas mis esperanzas en tu bondad,
extiende tus manos bondadosas hacia mi,
que sean ellas las que abran estas puertas diariamente
y que sean esas manos bondadosas las
que cierren el paso al infortunio
de la pobreza material.
Ciertamente Madre eterna, patrona del cielo,
con tu fuerza poderosa y mi trabajo consagrado,
estoy seguro que la victoria vamos a lograr.
¡Oh gloriosa siempre virgen!
Escucha la súplica de este siervo humilde
que con su labor y tesón te ofrenda en oración.
Te pide y ruega ante la certeza de tu amor,
por el bien propio y el de su familia,
para que nos concedas la prosperidad en este negocio.
Concede el favor de ver crecer mi emprendimiento,
de ver entre mis manos la prosperidad,
de poder disfrutar del esfuerzo del trabajo.
¡Oh madre virgen de Guadalupe!
Agradecido eternamente estaré
por los favores concedidos
y eternamente te honrare con flores
y luz colocadas en tu altar.
¡Oh virgen de Guadalupe!
Hoy vengo ante ti para pedirte me
permitas emprender un buen negocio.
Las situaciones difíciles desaparecerán con tu favor.
Intercede por mí para que este negocio sea prospero.
¡Amén!
Emprender un negocio
Iniciar un negocio o mantenerlo prospero es una tarea ardua que requiere sacrificio y entrega. Como sabemos, todo esfuerzo vale la pena cuando sus resultados proporcionan las satisfacciones deseadas.
En un negocio el cansancio y el aburrimiento no tienen cabida. Sin embargo, a veces se toman decisiones que ponen en riesgo el negocio, bien sea porque estamos agotados y nos falta energía, o porque no tenemos claro el camino.
En esos momentos no está demás pedir a la Virgen de Guadalupe para que interceda, nos llene de energía y recobremos las fuerzas y la sabiduría para seguir la marcha. ¡Éxitos!