La aparición milagrosa de María Auxiliadora a Don Bosco ¿Cómo fue?

La Virgen maría siempre estuvo presente en la vida de San Juan Bosco. Su madre Margarita, le inculcó desde muy joven el amor y la devoción por la Virgen. Le enseñó a orar e incluir en su vida la presencia de Dios. Desde entonces la Virgen fue el centro de toda obra de San Juan hasta el final de sus días. Descubramos un poco sobre La Aparición Milagrosa de María Auxiliadora a Don Bosco. ¿Cómo fue?
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El mundo católico celebra la advocación a la Virgen María Auxiliadora cada 24 de mayo, la veneran como Auxilio de los Cristianos. Es además la fiesta de la propia familia salesiana. Don Bosco se convirtió en un fiel devoto de la Virgen proponiendo en el transcurrir de su vida el ejemplo. Amparo y espíritu que nos ofrece la Virgen en llamado a nuestro auxilio.
Aparición de la Virgen María Auxiliadora en los sueños de Don Bosco
Cuando Don Bosco tenía tan solo 9 años de edad, se le presentó la Virgen donde le indicaba su vocación. Esa maravillosa misión y deber ante el mundo de profesar el sacerdocio. Ya Don Bosco sentía el deseo de entregar su vida al cristianismo cuando la Virgen le confirma y le fortalece ese importante deseo.
La Aparición Milagrosa de María Auxiliadora a Don Bosco. ¿Cómo fue? Años más adelante, en 1860, la Virgen vuelve a aparecer en los sueños de este santo. En esta oportunidad le dice que ella debe ser honrada con el título de “Auxiliadora”. Es en ese mismo sueño donde le señala el sitio donde deberá construir el templo dedicado a ella, la actual llamada Basílica de María Auxiliadora.
Construcción de la Basílica de María Auxiliadora
Don Bosco, desde los primeros años de su sacerdocio, tenía el propósito de construir un templo en honor a María Santísima. El segundo domingo de octubre de 1.844, Don Bosco tiene un sueño. En el que después de un largo viaje contempla una iglesia grande y hermosa en cuyo interior vio escrito “Aquí mi casa, de aquí mi gloria”.
En 1845, nuevamente en un sueño, contempla una grandiosa iglesia en el campo de los mártires turinenses. Justo en el mismo lugar donde se levanta hoy el Santuario Basílica de María Auxiliadora, cuya construcción se dio en 1.863. Posteriormente, cinco años después se llevó a cabo la consagración de este maravilloso templo.
Dentro de este santuario ubicado en Turín, Don Bosco colocó un gran cuadro de siete metros de alto con la imagen de María Auxiliadora. Dicha obra fue realizada por el pintor Lorenzone, quien recibió estrictamente instrucciones de San Juan Bosco para su realización. Así mismo, el pintor confesaría más adelante que al diseñar el rostro de la Virgen sentía como una mano invisible guiaba los pinceles y realizaba perfectos trazos.
Esta obra corresponde a una pintura barroca que exalta a la virgen como una Reina, lleva en su mano izquierda al Niño Jesús. Delante de ellos apóstoles, ángeles y otros santos, que les rinden triunfo por ser el verbo encarnado.
Don Bosco y la Virgen María Auxiliadora
Desde muy joven Don Bosco tenía sueños y visiones con la Virgen, fortaleciendo cada vez su fe y devoción. Le decía desde sueños que debía adquirir ciencia y paciencia. Porque él era un siervo de Dios y estaba destinado para educar a los muchos niños pobres del mundo. Juan Bosco fue de familia muy pobre y al quedar huérfano de padre pedía limosnas de casa en casa para sobrevivir él y su madre.
Su vida estuvo conducida por María Auxiliadora, con quien surgió una serie de pactos. María ayudaba a la familia salesiana a desarrollar sus obras mientras cada miembro difunde la devoción de esta virgen al mundo como un servicio eclesial. Dios aprovecha a la familia unida por Don Bosco para inculcar la fe en el pueblo cristiano.
Don Bosco estaba destinado a servir a Dios y a difundir la devoción por María Auxiliadora. Ella se convertiría en su más pura inspiración para crear diferentes congregaciones: Las Hijas de María Auxiliadora, Los Salesianos y los Cooperadores Salesianos. Todas inspiradas en esta Virgen para hablarles de Dios al mundo. También destacamos que la Basílica que hoy reposa en Turín, es obra de la Virgen quien fue su guía y su maestra.